Tras una serie de reuniones en Arabia Saudita y Omán, Hans Grundberg “aplaude el compromiso de las partes con un paquete de medidas destinadas a implementar un alto el fuego en todo el país… y (a) emprender preparativos para la reanudación de un proceso político inclusivo bajo el auspicios de las Naciones Unidas”, según el comunicado de prensa de la ONU.
Pays le plus pauvre de la péninsule arabique, le Yémen est plongé depuis huit ans dans une guerre opposant les rebelles Houthis, soutenus par l’Iran, aux forces gouvernementales appuyées depuis 2015 par une coalition dirigée par l’Arabie saoudite, et incluant notamment les Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, la violencia allí ha disminuido en gran medida desde una tregua negociada por la ONU en abril de 2022, que expiró el pasado octubre pero que todavía se respeta más o menos.
Según la declaración de la ONU, el acuerdo incluye compromisos para pagar los salarios de los funcionarios públicos, abrir carreteras hacia la ciudad de Taiz, bloqueada por los rebeldes, y otras partes de Yemen, y reanudar las exportaciones de petróleo.
«Los yemeníes esperan resultados tangibles de este nuevo acuerdo para avanzar hacia una paz duradera», afirmó Hans Grundberg, citado en el comunicado de prensa. Compromisos que “son ante todo una obligación hacia el pueblo yemení”, prosiguió.