Cuidado con los que no han declarado su piscina… Hacienda pretende identificar entre 80.000 y 100.000 este año. El monto de este ajuste fiscal ascendería así a «de 40 a 50 millones de euros en 2023», cuatro veces más que el año pasado, indica a Ouest-France Jérôme Fournel, director general de Finanzas Públicas. Para 2022, se habían desenterrado alrededor de 20.000 piscinas, lo que representa 10 millones de euros en ingresos adicionales por impuestos a la propiedad.
Para los franceses que serán fijados, el impuesto se verá afectado para el año en curso. Con una piscina, el impuesto a la propiedad aumenta “unos 200 euros por año en promedio”, subraya Jérôme Fournel. También estarán sujetos a un retiro durante los tres años anteriores «dependiendo de la fecha de construcción de la piscina o la fecha de adquisición de la propiedad».
Leer tambiénSequía: ¿las piscinas privadas están amenazadas?
Si algunos pretenden mantener en secreto su piscina, será difícil escapar de las autoridades fiscales porque la administración utiliza directamente fotografías aéreas del Instituto Geográfico Nacional. Luego, una inteligencia artificial compara estos mapas con el catastro para identificar piscinas no registradas. El año pasado, este sistema se probó en nueve departamentos, incluidos Morbihan, Vendée y Maine-et-Loire. En total, el 94% de los propietarios contactados habían reconocido tener una piscina sujeta a impuestos. “Este año, todos los departamentos están involucrados”, advierte Jérôme Fournel. Si el proyecto cuesta 24 millones de euros al Estado, «ya sería rentable», según ha informado Hacienda.
No obstante, las condiciones para construir una piscina son claras: si la piscina tiene entre 10 y 100 m2 hay que hacer una «declaración previa de obra en el ayuntamiento» y más allá de los 100 m2 hay que pedir licencia de obras. Luego, simplemente declare la construcción a las autoridades fiscales a través del servicio «administrar mi propiedad inmobiliaria» en su «espacio privado» en el sitio de impuestos.
Por ahora, solo las piscinas estarán fijadas este año. Otras construcciones, como ampliaciones de casas, pronto estarán sujetas a una auditoría fiscal. Por lo tanto, la inteligencia artificial seguirá entrenando “para obtener una tasa de detección óptima”, subraya Jérôme Fournel.