El valioso descubrimiento se mantuvo en secreto durante dos años. En 2022, un residente de Hérault que paseaba a su perro consiguió un esqueleto de titanosaurio de 70 millones de años. Para protegerlo del saqueo, la información se ocultó al público en general.

Mientras paseaba a su perro como de costumbre una mañana antes de ir a trabajar, Damien Boschetto, hoy de 25 años, vecino de Montouliers y apasionado de la arqueología, no tenía idea del increíble descubrimiento que iba a hacer. Un hueso, descubierto recientemente por un desprendimiento de rocas, le llama la atención y le lleva directamente al esqueleto completo de un dinosaurio del Cretácico de diez metros de largo. “Allí lo que es muy raro es que se trate de un dinosaurio conectado, es decir, sin que le falte ninguna pieza desde la parte posterior del cráneo hasta la cola”, explica Damien Boschetto en Le Parisien. El titanosaurio era un saurópodo, un herbívoro que podía pesar hasta varias decenas de toneladas.

Si el hallazgo es extraordinario, no es el primero en esta región famosa por sus tesoros históricos. Hasta la fecha, se han encontrado restos de más de veinticinco especies que datan de hace 70 millones de años en los distintos yacimientos de Cruzy, Creissan, Montouliers y Villespassans, en Saint-Chinianais. Una abundancia arqueológica que llevó al municipio de Cruzy a abrir un museo en 1975, dedicado a los hallazgos locales y regionales. La Asociación Cultural Arqueológica y Paleontológica (ACAP) trabaja hoy en la investigación y conservación de este patrimonio.

“Para que esté tan conectado, significa que el animal fue cubierto rápidamente después de su muerte, evitando cualquier dispersión por parte de los carroñeros”, explica Damien Boschetto sobre el titanosaurio. Desde entonces, el esqueleto ha sido trasladado al laboratorio del museo Cruzy para su estudio. Damien, por su parte, dejó su trabajo en el sector energético para realizar una maestría en paleontología.