El claro descenso observado desde hace tres días en Paso de Calais, sacudido por inundaciones desde hace dos semanas, se ve frenado por nuevas precipitaciones, que podrían provocar un nuevo aumento de los niveles el lunes.

Las lluvias caídas el domingo en Paso de Calais «deberían continuar hasta el lunes a mediodía» y corren el riesgo de «aumentar el nivel de los ríos», advierte Vigicrues.

Paso de Calais está en alerta naranja por “lluvias-inundaciones” y amarilla por “inundaciones y vientos” hasta el lunes al mediodía, según Météo-France.

Las inundaciones, que han dejado cinco personas heridas desde el 6 de noviembre, también han afectado a 6.000 viviendas, 160 comercios, 130 comercios y 53 granjas, según la prefectura. Un funcionario electo regional estimó el número de víctimas en más de 10.000, de las cuales una parte no puede regresar a sus hogares.

Vigicrues teme que en el Canche, en el suroeste del departamento, el descenso se vea “frustrado por las recientes lluvias, que siempre provocan desbordamientos localizados”.

La organización también prevé nuevas inundaciones entre el domingo por la tarde y el lunes por la mañana en el Liane, el Hem y el Aa, algunos de los ríos con mayor riesgo en los últimos días.

Precisamente en la cuenca del Aa se espera el lunes por la tarde el ministro de Economía, Bruno Le Maire, que se reunirá en Arques y luego en Saint-Omer con «partes interesadas locales y representantes del sector de los seguros, para acelerar atención y apoyo a las víctimas de desastres”, anunció Bercy el domingo.

«La compensación debe ser ejemplar y nuestra respuesta al mundo económico debe ser ejemplar», argumentó el domingo el ministro de Economía en una entrevista con el diario La Voix du Nord, insistiendo en que «ninguna empresa debería cerrar la puerta porque fue víctima de estas inundaciones.

Para que el departamento pueda hacer frente a futuras precipitaciones, el domingo se instalaron bombas adicionales, “para alcanzar la capacidad sin precedentes de 100.000 m3/hora”, precisó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, en X, ex-Twitter.