Una concentración de agricultores frente a un hotel en la región de Nueva Aquitania, convocada por la Coordinación Rural, provocó breves incidentes con la policía el lunes por la mañana, constataron periodistas de la AFP. Varias decenas de agricultores arrojaron estiércol y neumáticos delante del edificio, donde se había desplegado una gran fuerza policial detrás de las barreras de seguridad.
La situación degeneró cuando la maquinaria agrícola los empujó para forzar el paso. Luego, la policía utilizó gases lacrimógenos para obligar a los agricultores a retroceder y se produjeron breves enfrentamientos antes de que regresara la calma. «Queremos que se establezcan ayudas regionales de emergencia», pidió el CR, entre otras exigencias relativas, en particular, a las normas y a la instalación de operadores, según un comunicado de prensa.
En una respuesta enviada a la prensa, la región de Nueva Aquitania recuerda que «pone en marcha sistemas para anticipar y apoyar las crisis: equipos anticongelantes, pruebas de vacuna contra la gripe aviar, diversificación del arranque de vides, garantías de préstamos bancarios…»
A continuación, una delegación del sindicato pudo hablar con los cargos electos regionales, ante el pleno de la asamblea presidida por el socialista Alain Rousset, tal y como había solicitado el CR. “Es un verdadero diálogo de sordos”, lamentó José Pérez, copresidente de la Coordinación Rural de Lot-et-Garonne. La Región deplora que los representantes sindicales “se olviden de las mejores medidas aplicadas por la Región y, sobre todo, sugieran exigencias poco realistas”.