Irán está considerando la liberación de los miembros de la tripulación de un barco de bandera portuguesa, incautado el 13 de abril en el Golfo por fuerzas iraníes que lo acusaron de estar vinculado a Israel. «La liberación de la tripulación del barco es una gran preocupación para nosotros como cuestión humanitaria», dijo el sábado el ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, en una conversación telefónica con su homólogo portugués, Paulo Rangel, según un comunicado.
El portacontenedores MSC Aries, con 25 tripulantes a bordo, fue abordado a mediados de abril en aguas del Golfo por la Guardia Revolucionaria, el ejército ideológico de la República Islámica, que lo acusó de estar “vinculado a Israel”, el enemigo jurado de Teherán.
El incidente se produjo horas antes de un ataque sin precedentes con drones y misiles por parte de Irán contra Israel en respuesta a un ataque aéreo atribuido a Israel que mató a siete oficiales de la Guardia en Damasco. El 16 de abril, el Ministerio de Asuntos Exteriores portugués convocó al embajador iraní en Lisboa para exigir la “liberación inmediata” del barco y su tripulación.
Durante su conversación telefónica del sábado, Hossein Amir-Abdollahian informó a su homólogo portugués de que Irán había proporcionado «acceso consular» a los miembros de la tripulación e inició conversaciones sobre «su liberación con los embajadores en Teherán», sin más detalles. El Ministerio de Asuntos Exteriores indio, por su parte, anunció el 18 de abril que Irán había liberado a un miembro de la tripulación india y había concedido acceso consular a los otros 16 indios detenidos, que se encuentran «en buen estado de salud».
Teherán acusó al barco de violar “regulaciones marítimas internacionales” y afirmó que “pertenecía al régimen sionista”. La incautación del barco se produjo en medio de crecientes tensiones en Oriente Medio desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas palestino en la Franja de Gaza hace más de seis meses.