En Pavía, ciudad italiana situada en la región de Lombardía, una madre obtuvo el lunes 30 de octubre de los tribunales italianos que sus dos hijos de 40 y 42 años fueran expulsados del hogar familiar, según información del diario italiano La Provincia Pavese, retomada de Le Parisien. Según ella, sus dos hijos se negaron a salir de su casa, a pesar de que no participaban en las tareas del hogar y no contribuían económicamente a los gastos necesarios. Sin embargo, los dos hombres tenían cada uno un trabajo estable y remunerado.
La “mamá” de 75 años vivía con sus dos hijos desde que se separó de su padre. Después de apoyar a sus hijos durante un período difícil en el que luchaban por encontrar trabajo, le sorprendió que no salieran de casa una vez que encontraron un empleo estable. Al considerar que esta mujer ya no tenía una “obligación de manutención” hacia sus hijos debido a su edad, la justicia italiana les ordenó abandonar la residencia familiar antes del 18 de diciembre. El tribunal de Pavía insistió en que no existe ninguna ley «que conceda al hijo adulto el derecho incondicional a permanecer en el hogar que pertenece exclusivamente a los padres, contra su voluntad y únicamente en virtud de vínculos familiares».
