Un acto digno del «tercer mundo», su hijo se indignó. Un «abuso de poder», lanzó el líder del Partido Republicano. Familiares, aliados y hasta rivales de derecha de Donald Trump denunciaron el jueves 30 de marzo la acusación contra el expresidente estadounidense, asegurando que se trata de impedirle que retome su cuartel en la Casa Blanca en 2024.

“Seamos claros chicos. Es una cosa comunista. Es algo que haría sonrojar a Mao, Stalin, Pol Pot», irrumpió su hijo mayor, Donald Trump junior, en su programa de transmisión. “Creo que estamos en medio de una batalla por el futuro de nuestro país. Por nuestra propia existencia”, agregó, criticando al fiscal detrás de la acusación como un “izquierdista corrupto”. En Twitter, agregó que los opositores de su padre estaban «instrumentando a las autoridades para interferir en las elecciones de 2024 para detener a Trump». “La única solución es (…) entregárselo a la Casa Blanca!!!”, escribió.

Esta acusación es «digna del tercer mundo», «un acto oportunista dirigido a un oponente político en medio de una campaña electoral», agregó su hermano Eric Trump en un tuit.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, principal rival republicano de Donald Trump -aunque todavía no se ha declarado oficialmente candidato presidencial de 2024-, denunció la acusación como «contraria a los valores de Estados Unidos».

En cuanto a Mike Pompeo, también señalado para 2024, consideró que al decidir acusar a un expresidente, el fiscal Alvin Bragg “socavó la confianza de Estados Unidos en nuestro sistema judicial”.

La líder del Partido Republicano, Ronna McDaniel, tuiteó que la acusación fue «un flagrante abuso de poder por parte de un fiscal centrado en la venganza política en lugar de mantener a la gente a salvo».

“Mientras tanto, la ciudad de Nueva York, donde Alvin Bragg es fiscal de distrito de Manhattan, alcanzó un nuevo récord de delincuencia el año pasado”, dijo la cuenta oficial de Twitter del Partido Republicano.

La decisión de acusar a Trump ha «dañado irreparablemente a nuestro país», dijo el presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy. “El pueblo estadounidense no tolerará esta injusticia”, aseguró el tenor republicano en Twitter.

“Escandaloso”, por su parte dejó caer el influyente elegido Jim Jordan en un escueto tuit.

Es «un día oscuro para Estados Unidos», lamentó la electa Elise Stefanik, criticando a la fiscal, calificada de «socialista». «Decenas de millones de estadounidenses patriotas nunca se han movilizado más para ejercer sus derechos constitucionales de organizarse pacíficamente y VOTAR para salvar a nuestra gran república eligiendo al presidente Donald Trump en 2024», dijo en un comunicado de prensa. «¡Estoy con Trump!» tuiteó Marjorie Taylor Greene.