La fiscalía marroquí anunció el domingo la apertura de una investigación tras un “disparo de proyectil” que dejó un muerto y tres heridos, dos de ellos de gravedad, durante la noche del sábado al domingo en Esmara, en el territorio en disputa del Sáhara Occidental.

“El Fiscal General del Rey ante el Tribunal de Apelación de El Aaiún ha confiado al equipo de investigación la realización de los conocimientos técnicos y balísticos necesarios para identificar el origen y la naturaleza de los proyectiles”, subraya un comunicado de prensa citado por la agencia de prensa marroquí MAP. .

El fiscal “se ocupará de establecer los efectos jurídicos necesarios a la luz de los resultados de la investigación”, según la misma fuente.

Las autoridades locales habían informado anteriormente de cuatro explosiones durante la noche que dejaron un muerto y tres heridos, dos de ellos en estado grave, en Smara, situada a más de 1.000 kilómetros al sur de Rabat, sin explicar las posibles causas.

Estas explosiones afectaron a tres barrios de la localidad y “causaron daños materiales en dos viviendas”, dijeron entonces a la AFP las autoridades locales.

Los dos heridos graves fueron trasladados a un hospital de El Aaiún, 200 kilómetros al oeste de Smara, ciudad de más de 66.000 habitantes.

El tercer herido, levemente herido, pudo regresar a su casa tras recibir los primeros auxilios.

En imágenes publicadas en las redes sociales, que la AFP no pudo autentificar, vemos un tramo derrumbado del techo de una vivienda vacía y un impacto en el suelo y restos metálicos no identificados.

El Sáhara Occidental, antigua colonia española hasta 1975, es considerado un “territorio no autónomo” por la ONU en ausencia de un acuerdo definitivo.

Desde hace casi 50 años, un conflicto enfrenta a Marruecos con los separatistas del Polisario, apoyados por Argel.

El jueves, el Frente Polisario anunció en un comunicado de prensa que había “atacado las trincheras de las fuerzas de ocupación marroquíes cerca de Hanka Houria”, en la región de Smara.

“Los ataques del ejército saharaui continúan contra las fuerzas de ocupación marroquíes, que están sufriendo grandes pérdidas humanas y materiales a lo largo del Muro de la Vergüenza”, añadió el Polisario.

Este muro erigido por la parte marroquí en los años 1980 tiene más de 2.700 kilómetros de largo y separa las dos partes del Sáhara Occidental, la dominada por Marruecos y la otra que el Polisario considera “liberada”.

Rabat, que controla casi el 80% de este vasto territorio, con aguas ricas en peces y ricas en fosfatos, aboga por un plan de autonomía bajo su soberanía.

El Polisario exige la celebración de un referéndum de autodeterminación en todo el territorio bajo los auspicios de la ONU, que estaba previsto cuando se firmó el alto el fuego en 1991, pero que nunca se llevó a cabo.

El 13 de noviembre de 2020, el Polisario declaró que se encontraba “en estado de guerra de autodefensa” y advirtió a la comunidad internacional que todo el Sáhara Occidental era considerado zona de guerra por la organización independentista.

En respuesta, el rey de Marruecos indicó que seguía comprometido con el alto el fuego y dijo que estaba “firmemente decidido a reaccionar, con la mayor severidad y en el marco de la autodefensa, contra cualquier amenaza”.

El Consejo de Seguridad de la ONU pidió en octubre de 2022 a Marruecos, el Polisario, Argelia y Mauritania que reanudaran las negociaciones, estancadas desde 2019, con el objetivo de alcanzar una solución “duradera y mutuamente aceptable”.