La empresa Minera Panamá está buscando reabrir la mina de cobre en el distrito de Donoso, en la provincia de Colón, con el respaldo del gobierno panameño. Después de que el presidente José Raúl Mulino autorizara la exportación del concentrado de cobre almacenado en las bodegas de la mina, TVN Noticias realizó un recorrido para evaluar su estado actual. Manuel Aizpurúa, gerente país de Minera Panamá, confirmó que la empresa está trabajando en la suspensión de los arbitrajes contra el Estado panameño para facilitar la reapertura de la mina.
El camino hacia la reapertura de la mina
Aizpurúa expresó la satisfacción de la empresa ante la decisión del presidente Mulino y destacó la importancia de pasar de las palabras a la acción. La empresa ha instruido a sus abogados para entablar conversaciones con el equipo legal del gobierno con el objetivo de suspender los arbitrajes y discutir la reapertura de la mina. Aunque Mulino mencionó la generación de ingresos para el Estado a través de la venta del concentrado de cobre, Aizpurúa aclaró que estos ingresos se destinarán a preservar el sitio hasta que se materialice la reapertura.
Según Aizpurúa, Minera Panamá aguarda instrucciones del Ministerio de Comercio e Industria para exportar el concentrado de cobre y reanudar las operaciones mineras. Con aproximadamente 130 mil toneladas de cobre almacenadas, valoradas en unos 250 millones de dólares en el mercado actual, la empresa busca establecer un diálogo sin precondiciones con el gobierno panameño. La reapertura de la mina, que ha estado cerrada durante más de un año debido a un fallo judicial, es un paso crucial para la economía y las comunidades locales.
Desafíos y perspectivas futuras
El Ministro de Comercio e Industria, Julio Moltó, ha expresado que no ve la posibilidad de nuevos contratos en el horizonte, mientras que Aizpurúa subraya la importancia de que la operación minera genere beneficios para el país y las comunidades, cumpliendo con estándares socioambientales rigurosos. El proceso de diálogo entre Minera Panamá y el gobierno panameño está condicionado a la suspensión de los arbitrajes pendientes, que han sido un obstáculo para avanzar en la reapertura de la mina.
La historia de la mina de cobre en Panamá es una montaña rusa de desafíos legales y ambientales. Tras un fallo de inconstitucionalidad que invalidó un contrato entre Minera Panamá y el Estado, la mina ha permanecido cerrada por más de un año. La empresa ha continuado con actividades de mantenimiento para proteger el entorno y prevenir posibles incidentes ambientales. La reapertura de la mina es un paso clave para la economía panameña y la estabilidad de las comunidades locales.
Con información de María De Gracia, se espera que el diálogo entre Minera Panamá y el gobierno panameño allane el camino para la reactivación de la mina de cobre, generando beneficios sostenibles para todos los involucrados. La suspensión de los arbitrajes pendientes y el compromiso con estándares socioambientales son elementos fundamentales para el éxito de esta empresa y el bienestar de Panamá.