El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el domingo por la noche el regreso “en las próximas horas” del embajador francés a Niamey y la salida de las tropas francesas a finales de año, tras un enfrentamiento de dos meses con la junta nigerina.

«Francia ha decidido traer de vuelta a su embajador», a quien París se ha negado hasta ahora a retirar, y «ponemos fin a nuestra cooperación militar con Níger», declaró Emmanuel Macron en una entrevista televisiva, indicando que los 1.500 soldados franceses se irían «en las próximas semanas y meses” y que la retirada estaría completamente completada “a finales de año”.

La presencia de Francia en Níger, sin embargo, está justificada hasta ahora, según Emmanuel Macron, «porque, a petición de los países y de la región, hemos estado luchando contra el terrorismo». El Presidente de la República también saludó el compromiso de los soldados franceses en la Operación Barkhane.

«Ya no existe una Françafrique, no intervenimos cuando hay un golpe de Estado en África», añadió Emmanuel Macron.

El presidente francés declaró a mediados de septiembre que el embajador francés en Níger había sido tomado como “rehén” por los militares en el poder y que sólo comía “raciones militares”. Los golpistas, que derrocaron al presidente Mohamed Bazoum y tomaron el poder el 26 de julio, ordenaron la expulsión del embajador francés a finales de agosto, después de que París se negara a cumplir un ultimátum que exigía su salida. Francia inicialmente se opuso a esta salida durante varias semanas, argumentando que este gobierno no tenía autoridad para fundamentar tal solicitud.