Origen de los fondos para el IVM: arcas del Estado según Mulino
La situación económica del país ha sido puesta en el centro de atención con respecto a la resolución del problema del programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM). El presidente de la República, José Raúl Mulino, ha afirmado que el dinero necesario para abordar esta cuestión provendrá de los fondos del Estado. Esta revelación marcó el inicio de su conferencia semanal, en la que destacó la importancia de la realidad económica y financiera del país en la búsqueda de soluciones para el IVM.
A medida que avanzan las conversaciones para abordar el déficit del programa de Invalidez, Vejez y Muerte, se hace evidente que la clave radica en analizar detenidamente la realidad económica y financiera del país. Mulino ha enfatizado que cualquier decisión que se tome provendrá de esta base fundamental, dejando en claro que no se buscarán soluciones externas para resolver esta problemática.
Al analizar los datos financieros del programa de IVM al 31 de diciembre de 2023, se revela un déficit de $673.573.263 en su componente exclusivamente de beneficio definido. Esta cifra representa un aumento significativo de $18.988.608 en comparación con el año anterior, reflejando la urgencia de abordar esta situación de manera efectiva.
La decisión de Mulino de centrar la atención en los fondos del Estado para resolver el problema del IVM se produce apenas cuatro días después de la instalación de mesas de trabajo por parte de la CSS. Estas mesas de trabajo estarán activas hasta el 31 de octubre, brindando un espacio para recibir y debatir propuestas tanto de los gremios representados en el IVM como del sistema de salud.
Durante las 12 sesiones programadas para cada mesa, se espera recibir y analizar detalladamente las propuestas presentadas, con el objetivo de encontrar soluciones sostenibles y efectivas para el programa de Invalidez, Vejez y Muerte. Es fundamental que las partes involucradas trabajen en conjunto para alcanzar acuerdos que beneficien a todos los sectores involucrados.
Además, se ha establecido que las propuestas, actas de reuniones y datos relevantes sobre las mesas de IVM y del sistema de salud estarán disponibles para los miembros de las mesas y el público en general a través del sitio web oficial de la CSS. Esta transparencia en el proceso de discusión y toma de decisiones es crucial para garantizar la participación ciudadana y la rendición de cuentas en este importante tema.
Origen de la crisis del IVM
La crisis actual del programa de Invalidez, Vejez y Muerte tiene sus raíces en la reforma a la Ley 51 de 2005, que entró en vigor en 2008. Esta reforma estableció la segregación de los trabajadores en dos subsistemas: el Subsistema Exclusivo de Beneficio Definido (SEBD) para aquellos mayores de 35 años, y el Subsistema Mixto (SM) para los más jóvenes.
A partir de ese momento, el subsistema de beneficio definido se cerró para nuevos cotizantes, mientras que el sistema mixto absorbió a todos los futuros afiliados. A pesar de que la ley requería revisiones periódicas, los gobiernos posteriores no actuaron con la celeridad necesaria para abordar los desafíos que surgieron. Esto llevó a una serie de mesas técnicas que no lograron resultados concretos y retrasaron la toma de decisiones cruciales para la sostenibilidad del programa.
En conclusión, la crisis del programa de Invalidez, Vejez y Muerte requiere una acción decisiva y coordinada por parte de todas las partes involucradas. La transparencia, la colaboración y el enfoque en la realidad económica del país serán fundamentales para encontrar soluciones efectivas y duraderas. Con un compromiso conjunto y un análisis profundo de la situación, es posible superar los desafíos actuales y garantizar la viabilidad del IVM a largo plazo.