La batalla ahora es en todo el campo. Y esto abre un vasto cara entre el ala de Forza Italia, que está encabezada por el presidente de la Ars Gianfranco Brazos y la Liga «Son buzzurri que nos odian», dice sin palabras, el comisionado forzista en Sicilia. El punto de partida es una vez más el cierre de la tonnara de Favignana, donde la Liga ha sido el partido más votado para el Europeo con el 29.1 por ciento: «Pensar que los sicilianos no entienden que tomamos la c… y darle los votos, dice Brazos – me hace muy loco. En la isla de Favignana, ahora viene el agradecimiento de inmediato: el cierre de la Tuna».

La polémica ha estallado ya el jueves. El secretario de estado de la liga de Franco Manzato ha firmado un nuevo decreto para el atún cuotas, bajando a 14 toneladas, la de la isla de Favignana: ayer por la mañana, así, la empresa que había sido reabierto, «Nino Castiglione», ha anunciado planes para de inmediato a cerrar sus puertas. Así pues, la controversia se ha convertido en político, con las protestas que se suscitan por la Fuerza a Italia en particular, sino como una cascada de todas las partes.

Ahora el nuevo empuje de los Brazos, según la cual los jugadores son «gente malvada, que nos odian. Siempre he pensado que los sicilianos son una gente inteligente y entender que estos nos llevará alrededor de matar, ¿por qué nos quieren muertos. Le dieron el 30 por ciento – continúa el presidente del Parlamento regional de la siciliana – me gustaría matar a uno de los que votaron por ellos. Estoy empezando a tener vergüenza de ser siciliano». © Reproducción reservados