¿Tendremos que pasar necesariamente por una revolución para salvar el planeta? Esto es lo que teoriza Jean-Luc Mélenchon. Los Insoumi lo volvieron a detallar el martes, durante la “Cumbre de los Pueblos” en Bruselas. Un encuentro que reúne a funcionarios de los Estados de América Latina y el Caribe (CELAC) y figuras de la izquierda europea. “Soy la edad que me permite recordar el momento en que creíamos que teníamos tiempo. Si fracasabamos en una elección, nos encontraríamos en la siguiente, y construiríamos, con la infinita paciencia de los círculos populares. Ahora no tenemos más tiempo, solo tenemos plazos”, dijo.

En consecuencia, según el excandidato de LFI a las elecciones presidenciales, «sólo la acción revolucionaria y subversiva, que asegure la ruptura con el capitalismo, puede permitirnos sacar a la humanidad del callejón sin salida». De lo contrario, el «capitalismo», que es «incapaz de corregirse a sí mismo, de controlarse a sí mismo», conducirá a la «catástrofe». “El capital se alimenta de la destrucción que provoca. El capital no podrá parar”, advirtió Jean-Luc Mélenchon que quiere impedir “la continuación de un sistema absurdo que, como dijo Marx, agota al hombre y a la naturaleza”.

Para los Insoumis, el cambio climático también es ya tan “irreversible” que la humanidad “entrará en una era de absoluta incertidumbre sobre el clima”. «Es porque el clima se estabilizó que las actividades humanas pudieron estabilizarse y organizarse», dijo. Al insistir: “El capitalismo es un oscurantismo porque nos impide considerar desde un punto de vista racional, las soluciones racionales que debemos aportar”.