El ministro de Seguridad, Frank Ábrego, realizó una visita a la provincia de Chiriquí, específicamente a las instalaciones del cuartel de la zona de la Policía de David que lleva seis años en construcción y aún no ha sido terminado. Durante su recorrido, Ábrego abordó temas de seguridad pública, incluyendo la posibilidad de extender el toque de queda en la región.
Ábrego expresó su preocupación por el estado actual de las instalaciones policiales en Chiriquí, señalando un evidente hacinamiento en las subestaciones debido a la falta de espacio adecuado. Ante esta situación, el ministro anunció que se retomarán los trabajos de construcción para finalizar el cuartel, con el objetivo de brindar a los agentes de policía un entorno de trabajo adecuado que les permita realizar sus funciones de manera óptima.
Durante la evaluación primaria del cuartel, Ábrego destacó que de haberse completado la construcción en su momento, se habrían obtenido instalaciones de primera calidad. Sin embargo, la realidad es que actualmente existe un área incompleta que limita las actividades de los agentes policiales, tanto en términos de ejercicio físico como de tareas administrativas.
En relación a la continuación de la construcción del cuartel, el ministro informó que el director de la Policía se reunirá con el consorcio encargado de la obra para explorar la posibilidad de retomar los trabajos. En caso de que no sea viable desde el punto de vista económico, se buscará otra empresa o se seguirán los lineamientos legales pertinentes para garantizar la culminación de la construcción.
Además de abordar la situación de las instalaciones policiales en Chiriquí, Ábrego también se refirió a la implementación de retenes como medida de seguridad en la región. A pesar de las críticas de algunos sectores de la comunidad, el ministro enfatizó la importancia de establecer puntos de control en caso de actividades delictivas para facilitar la captura de delincuentes y garantizar la seguridad de la población.
En cuanto al toque de queda, medida implementada en San Miguelito y Colón por orden del presidente José Raúl Mulino, Ábrego no descartó la posibilidad de extender esta medida a ciertos sectores de Chiriquí. Sin embargo, aclaró que la solicitud de imponer el toque de queda en la región depende de los alcaldes locales, quienes deben evaluar la necesidad de esta medida para contrarrestar la delincuencia en sus comunidades.
En Colón, el toque de queda se ha establecido de lunes a miércoles de 8:00 pm a 5:00 am, y de jueves a domingo de 9:00 pm a 6:00 am en todos los distritos de la provincia. Aunque no se ha especificado si la medida solo aplica a menores de edad, se espera que contribuya a reducir la incidencia delictiva en la región.
En cuanto a San Miguelito, aún no se ha definido el horario del toque de queda ni la extensión de la medida a todo el distrito. Se espera que en los próximos días se tome una decisión al respecto, en función de la situación de seguridad en la zona y las necesidades de la población.
En resumen, la visita del ministro Frank Ábrego a Chiriquí ha puesto de manifiesto la importancia de garantizar instalaciones policiales adecuadas para el desempeño de las funciones de seguridad en la región. Además, la posibilidad de extender el toque de queda en ciertos sectores de la provincia refleja la preocupación por contrarrestar la delincuencia y velar por la seguridad de los ciudadanos.