El panorama financiero de Panamá se encuentra bajo presión debido a la reciente reducción en la calificación crediticia por parte de Standard & Poor’s Global Ratings. Esta disminución coloca al país en riesgo de perder su grado de inversión, principalmente debido al aumento de la deuda pública y a la lentitud en los ingresos estatales.
Sin embargo, la aprobación del proyecto de ley 163, que reforma la Ley 51 de 2005 referente a la Caja del Seguro Social (CSS), podría ser clave para estabilizar las finanzas públicas a largo plazo. Según el informe de S&P, esta reforma de pensiones podría generar transferencias extraordinarias a la CSS, lo que ayudaría a enfrentar los déficits actuales.
El ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, ha expresado optimismo en cuanto a la posibilidad de revertir la calificación crediticia, siempre y cuando se tomen medidas eficientes en el manejo fiscal. Sin embargo, la falta de decisiones concretas podría complicar el acceso al financiamiento para el gobierno nacional.
En medio de esta situación, la Comisión de Salud de la Asamblea Nacional ha iniciado consultas públicas sobre el proyecto de reforma. A pesar de las limitaciones en el número de personas atendidas por día, la alta afluencia de participantes ha generado la posibilidad de cancelar las giras por las provincias.
El diputado Carlos Tito Afú ha destacado la necesidad de realizar ajustes al proyecto de ley, especialmente en lo referente al nuevo sistema de pensiones y a los poderes otorgados al director de la CSS. A pesar de las dudas generadas tanto en los diputados como en la ciudadanía, se ha alcanzado un acuerdo con el Ejecutivo para coordinar reuniones que agilicen el análisis de los aspectos más críticos.
El presidente de la República, José Raúl Mulino, ha dejado en claro que no retirará el proyecto y que los diputados tienen hasta el 31 de diciembre para aprobarlo en sesiones extraordinarias. A pesar de la presión ciudadana y la controversia generada, la urgencia de tomar decisiones que equilibren las necesidades de la población con la sostenibilidad financiera de la CSS sigue siendo un desafío importante para el país.