news-14102024-152944

El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) presentó ajustes al presupuesto general del Estado para 2025, que asciende a $26,084 millones y que fue retirado de la Asamblea Nacional. A pesar de los intentos por reducir gastos y generar ahorros, algunos aspectos han sido objeto de controversia y debate entre los diputados.

En el proyecto de presupuesto retirado, se limitan los traslados de partidas, se suspenden los pagos de bonificaciones y se establecen restricciones en los gastos de representación. Sin embargo, se han extendido beneficios en dietas y uso de celulares, lo que ha generado críticas y cuestionamientos.

El documento propone el pago de dietas para quienes participen en diversas instancias, lo cual no estaba contemplado en el presupuesto actual. Además, se permite el uso de celulares a entidades públicas e intermediarios financieros, ampliando el beneficio más allá de lo establecido anteriormente.

En cuanto a los viáticos, se mantienen los montos aprobados en 2024, sin reducciones. Los funcionarios de alto rango seguirán recibiendo viáticos diarios para misiones oficiales, tanto dentro como fuera del país, según lo establecido en la ley vigente.

El presupuesto de 2025 también limita los traslados de partidas, lo que impide a las entidades públicas solicitar fondos adicionales al Ejecutivo. Esta medida busca evitar el uso de saldos de ahorros comprobados para otros gastos, una práctica comúnmente empleada en el pasado.

Otra modificación polémica es la eliminación de bonificaciones para funcionarios de entidades recaudadoras, debido a la insuficiencia presupuestaria. Asimismo, se establecen restricciones en los gastos de representación, que solo se pagarán mientras los funcionarios estén en ejercicio.

A pesar de las críticas y objeciones de la Comisión de Presupuesto, el presupuesto aún podría ser aprobado en sesiones extraordinarias, si el Ejecutivo así lo decide. Aunque se han planteado preocupaciones sobre el cumplimiento de la ley y el límite de déficit, existen plazos para su aprobación dentro del periodo establecido.

En conclusión, el presupuesto para 2025 ha generado controversia y debate en la Asamblea Nacional, con divergencias sobre la gestión de gastos, beneficios y limitaciones. A medida que se discute y se revisa el proyecto, se espera llegar a un consenso que beneficie al país en su conjunto.