Más de 409 centros educativos en todo el país están llevando a cabo un proceso de descarte de activos fijos con el fin de mejorar el entorno escolar y optimizar los espacios durante el año lectivo 2025. Esta iniciativa es liderada por el Ministerio de Educación (Meduca) en colaboración con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y la Contraloría General de la República.
El proceso ha dado inicio en las regiones de San Miguelito, Panamá Centro, Herrera y Veraguas, con un total de más de 17 toneladas de materiales retirados únicamente en San Miguelito. Ramiro García, jefe de Bienes Patrimoniales del Meduca, ha destacado que este esfuerzo busca mantener un entorno educativo limpio, seguro y libre de riesgos, lo que a su vez permitirá una mejor utilización de los espacios en las escuelas.
Un esfuerzo por mejorar el entorno educativo
El enfoque principal de este proceso de descarte se ha centrado en el mobiliario escolar, el cual representa el 90% de los materiales retirados. El 10% restante incluye equipos informáticos, artículos de refrigeración y objetos eléctricos. Esta selección meticulosa busca garantizar que los recursos utilizados en los centros educativos estén en óptimas condiciones para brindar un ambiente propicio para el aprendizaje.
Aymeth Espinosa, directora regional de San Miguelito, ha resaltado la importancia de la limpieza en las escuelas, la cual abarca la identificación y retirada de muebles y artículos en desuso o dañados. Es fundamental que este proceso se realice cumpliendo con las normativas legales establecidas para la gestión de bienes estatales, asegurando la transparencia y eficacia en la administración de los recursos públicos.
Impacto en la calidad educativa
Además de los beneficios evidentes en términos de orden y limpieza en los centros educativos, este proceso de optimización tiene un impacto directo en la calidad educativa a nivel nacional. Al contar con espacios más adecuados y libres de elementos obsoletos o en mal estado, se crea un entorno propicio para el aprendizaje y el desarrollo integral de los estudiantes.
La mejora en las condiciones físicas de las escuelas no solo beneficia a los estudiantes, sino que también contribuye a la motivación y satisfacción de los docentes y el personal administrativo. Un entorno limpio, seguro y bien organizado promueve la eficiencia en las actividades escolares y fortalece la sensación de pertenencia a la comunidad educativa.
En resumen, el proceso nacional de descarte de mobiliario en los centros educativos liderado por el Meduca representa un paso significativo hacia la creación de entornos educativos más adecuados y funcionales. A través de la colaboración interinstitucional y el compromiso con la transparencia y la eficiencia en la gestión de recursos, se busca garantizar que los estudiantes de todo el país puedan disfrutar de instalaciones óptimas para su desarrollo académico y personal.















