Programa de canje de armas del Gobierno: 30 mil dólares invertidos, 145 armas recibidas

En un esfuerzo por combatir la violencia armada en Panamá, el Ministerio de Seguridad ha puesto en marcha un programa innovador de canje de armas por comida y medicina. Ayer, en La Gran Estación de San Miguelito, se recolectaron un total de 145 armas, más de 10 mil municiones y otros artículos relacionados como parte de esta iniciativa.

El director de la Policía Nacional, Jaime Fernández, reveló que el gobierno desembolsó más de 30 mil dólares por estos elementos. Fernández enfatizó que el programa garantiza total confidencialidad a quienes entregan las armas, quienes simplemente deben entregar el arma, ser categorizada y recibir el pago correspondiente según el tipo de arma.

Próximas fechas y ubicaciones
Mañana, el programa se trasladará al sector de La Doña y luego a Colón, con protocolos establecidos en colaboración con la Gobernación de esta provincia para determinar las fechas exactas.

Impacto en la seguridad ciudadana
El director de la Policía confía en que esta medida contribuirá a reducir los índices de violencia en las áreas donde se implementa, especialmente en delitos como robo y homicidio. Las armas recolectadas, que incluyen automáticas, bombas lacrimógenas, pistolas y armas de grueso calibre, se trasladan a la Dirección Institucional en Asuntos de Seguridad Pública para un control adecuado, aunque no se realizan peritajes.

Origen y estrategias de seguridad
Fernández señaló que muchas de las armas ingresan ilegalmente al país, algunas incluso datan de décadas pasadas. En respuesta, se ha intensificado la presencia policial en áreas estratégicas como calles, centros comerciales y transporte público. Además, se enfatiza el acercamiento a la comunidad, especialmente con niños y madres, y se ha aumentado el despliegue de unidades lince y vehículos para mejorar la eficacia operativa.

Este programa refleja el compromiso del Gobierno de Panamá en promover la seguridad ciudadana y reducir la violencia armada en el país. Cada arma retirada de las calles es un paso hacia un entorno más seguro y pacífico para todos los ciudadanos.