El Sindicato de Industriales de Panamá (SIP) elogió la decisión de reducir el Presupuesto General del Estado para el año fiscal 2025 a B/. 26,084 millones, lo que representa una disminución significativa en comparación con el presupuesto del año anterior. Esta acción fue considerada como un buen paso por parte del Ejecutivo, demostrando su compromiso y voluntad hacia el pueblo panameño.
El gremio empresarial expresó su apoyo a estas medidas, destacando la importancia de garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas. Asimismo, el SIP reconoció los esfuerzos del Gobierno por implementar medidas eficientes para reducir el déficit fiscal del próximo año, priorizando las áreas de mayor necesidad y gestionando los recursos de manera responsable.
Aunque la reducción en el presupuesto representa un hito histórico en el gasto público del país, la aprobación final recae en el Legislativo. El Consejo de Gabinete autorizó al ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, a presentar el presupuesto ante la Asamblea para su evaluación y aprobación.
Sin embargo, algunos diputados han expresado su preocupación por el retraso en la presentación del presupuesto, ya que limitará el tiempo disponible para su discusión. Se deben llevar a cabo vistas presupuestarias para 96 instituciones antes de su aprobación, lo que podría complicar el proceso.
El SIP hizo un llamado a los diputados de la Comisión de Presupuesto para que consideren el presupuesto con buena voluntad y en beneficio de la población. El objetivo es utilizar los recursos de manera eficiente, atender las necesidades reales, generar empleo y mejorar las condiciones de vida de todos los ciudadanos.
El proyecto de ley del Presupuesto General del Estado 2025 fue aprobado el 4 de octubre por el Consejo de Gabinete, reflejando una reducción del 15% en comparación con el presupuesto de 2024. El Gobierno se ha enfocado en optimizar los gastos operativos y promover la inversión pública de manera eficiente y transparente.
A pesar de las restricciones existentes, el Gobierno ha buscado recortar gastos operativos para destinar más recursos a inversiones. El escenario económico global sigue siendo incierto, con proyecciones de crecimiento influenciadas por factores como la inflación y las tensiones geopolíticas.
En última instancia, el objetivo del Gobierno es presentar un presupuesto realista y responsable que garantice la estabilidad financiera del país, fomente la confianza, impulse la inversión y estimule el crecimiento económico. Se promoverán políticas públicas que impulsen el empleo y el desarrollo, creando un entorno propicio para el bienestar social y la prosperidad de los ciudadanos.