Oficialmente en Rusia, un barco pesquero fue víctima de un incendio cerca del enclave ruso de Kaliningrado el 19 de marzo. Entre los siete tripulantes del pesquero Captain Lobanov, tres personas murieron y un cuarto marinero resultó gravemente herido. Así lo anunció el portavoz del Gobierno regional, Dmitri Lyskov, según retransmitió este lunes la agencia de prensa rusa Tass.
Pero según el medio ruso independiente Dojd, con sede en Letonia, el pesquero podría haber sido víctima de un disparo realizado por error por parte de la marina rusa. De hecho, Dojd recoge el testimonio de un familiar de uno de los tripulantes que afirma que el barco fue alcanzado por un misil que destruyó el camarote del capitán y que los servicios de inteligencia rusos pidieron expresamente a los supervivientes que guardaran silencio sobre el incidente.
“La tripulación del pesquero se disponía a acostarse cuando un misil impactó en el puente. Cuando llegaron los socorristas, todos sabían perfectamente que tres personas habían muerto y que se había disparado un misil. Pero decidieron decir que había habido un ‘incendio’”, informó la fuente. Según este testimonio, el barco se hundió mientras las autoridades rusas afirmaban que había sido remolcado a un puerto seguro. Los medios de comunicación también publicaron un vídeo en Internet. En estas imágenes no autenticadas, se ven escombros en el mar junto al barco y el casco parece estar rasgado, lo que sugiere una explosión.
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Periódicos rusos como Lenta también informaron que la corbeta rusa Boikiy había realizado con éxito ejercicios de tiro en la zona el mismo día, en particular neutralizando un submarino enemigo ficticio con torpedos dedicados a la lucha submarina o utilizando sus sistemas de artillería antiaérea. Encargada en 2013, esta corbeta de clase Steregushchiy, dedicada principalmente a la guerra antisubmarina, también cuenta con misiles antibuque Uran y misiles antiaéreos Redut.
Según informó esta vez la agencia Tass, el gobernador de la región anunció una indemnización de un millón de rublos (unos 10.000 euros) a las familias de las víctimas y de medio millón a los heridos. Tass también precisa que el pesquero ya había sido víctima de un incidente en junio de 2021. El pesquero estuvo a punto de hundirse en la bahía de Kaliningrado, informó la agencia de prensa sin especificar la naturaleza del incidente.
Este incidente recuerda al hundimiento del arrastrero Bugaled Breizh frente a las costas del Cornualles británico. Si bien la justicia británica concluyó que se trataba de un “accidente de pesca”, las familias de las víctimas todavía tienen la sensación de que “razones de Estado se oponían a la verdad”, explicó su abogado en una entrevista con Le Figaro. El día de la tragedia, muchos submarinos patrullaban la zona debido a maniobras militares o en misión furtiva. Uno de ellos podría haber enganchado el cable de la red de arrastre que arrastraba el barco, arrastrándolo hasta el fondo.