Rechaza las acusaciones de los denunciantes y lamenta una presunción de inocencia «insignificante»: Saïd Chabane, ex presidente y actual propietario del club de fútbol Angers (L2), negó el lunes ante el tribunal penal las agresiones sexuales de las que se acusa a siete mujeres.

Saïd Chabane, de 59 años, está procesado hasta el martes por agresión sexual “cometida por una persona que abusa de la autoridad que le confiere su cargo”.

La primera denuncia fue presentada en enero de 2020 por un empleado de la OCS en Angers. Denunció hechos que, según dijo, ocurrieron unos meses antes durante un viaje a Madrid en el que participaron varios empleados.

Según la joven, entonces de 25 años, Saïd Chabane le había acariciado el muslo durante un viaje en taxi, antes de tomarle la mano y colocarla sobre su pene erecto. Luego, según ella, le tocó las nalgas y el pecho durante una sesión de compras individual, a la que ella “no podía ni se atrevía a decir que no”.

“No soy yo, no soy yo”, repite Saïd Chabane en el estrado.

Cuando el presidente le preguntó por qué, en su opinión, el denunciante presentó una denuncia, respondió: “No lo sé. No sé. Esta es la pregunta que me hago desde hace cuatro años. No sé.»

– “¿Es (el denunciante) un mentiroso?”, insistió poco después el presidente.

– “En este contexto, sí”, dijo.

– «Chovinismo masculino» –

“Presenté una denuncia para evitar que esta conducta le pase a otras mujeres. Presenté la denuncia por mi cuenta, sin ninguna otra presión”, declara el denunciante.

La joven afirmó haber “renunciado a (su) futuro profesional” tras su denuncia, precisando que ahora trabaja en un sector ajeno a sus estudios de marketing deportivo.

Otra denunciante explica que fue atacada mientras estaba sola con Saïd Chabane en las oficinas del club. Según ella, el señor Chabane le masajeó los hombros y luego le tocó el pecho mientras estaba sentada en su puesto. Luego la abrazó mientras le acariciaba las nalgas, dijo en su denuncia.

“Nunca me encontré solo frente a ella”, respondió el acusado en el estrado.

Los siete denunciantes eran empleados del club o de su empresa de charcutería en el momento de los hechos denunciados, entre 2014 y 2019.

Uno de ellos habló durante la audiencia de un “ambiente de machismo” dentro del club en ese momento. «Me aconsejaron que no me quedara sola con (Saïd Chabane)», añadió.

Vestido con traje y corbata, Saïd Chabane habló al inicio de la audiencia para denunciar una “presunción de inocencia que se ha vuelto insignificante”.

“Estoy condenado desde febrero de 2020 (fecha de su acusación, NLDR). Me enfrenté a una campaña virulenta, fui objeto de mensajes SMS amenazantes, presiones (…) En la sociedad actual, ser un hombre supuestamente en el poder te convierte en un culpable designado”, afirmó, declaró en el estrado.

Propietario de la OCS de Angers desde 2011, Saïd Chabane se describió como un hombre que “empezó de cero”, “directivo” y “exigente”, pero que nunca mantuvo una relación de “dominación” con sus empleados.

Enredado en una sucesión de asuntos y en una situación deportiva catastrófica, Saïd Chabane cedió en marzo la presidencia del club a su hijo Romain.

Llegó a la dirección del club y a su capital en 2011 y fue uno de los principales protagonistas de la espectacular recuperación de la SCO a nivel deportivo durante los años siguientes, incluido el regreso a la L1 en 2015.

Descendido al final de la temporada 2022/2023, el SCO ha levantado cabeza. En lo más alto de la Ligue 2 después de 18 jornadas, es uno de los favoritos al ascenso a la Ligue 1 en mayo.