La esposa del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quien presentó una nueva solicitud de revisión contra la decisión del gobierno británico de extraditarlo a Estados Unidos, solicitó el lunes 10 de julio el indulto del presidente estadounidense.

“Biden podría acabar con esto en cualquier momento. A la administración (estadounidense) no le interesa que Julián sea juzgado durante un período electoral”, declaró Stella Assange, durante una conferencia en el Swiss Press Club en Ginebra. “Reino Unido está enviando señales de que está dando un paso al frente y quiere ver a Julian extraditado. Así que Julian muy bien podría ser extraditado a fines del verano (…). La administración de Biden tendrá que lidiar con eso y no creo que sea lo mejor para ellos”, dijo.

El ciudadano australiano de 52 años está siendo procesado en Estados Unidos por haber publicado desde 2010 más de 700.000 documentos confidenciales sobre actividades militares y diplomáticas estadounidenses, en particular en Irak y Afganistán. Como tal, se enfrenta a décadas de prisión. Detenido por la policía británica en 2019 tras siete años confinado en la embajada de Ecuador en Londres para evitar ser extraditado a Suecia por cargos de agresión sexual, lleva cuatro años recluido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, al este de Londres.

Según Stella Assange, “lo más inteligente que podría hacer” Biden “sería terminar con todo esto”. La cuestión de su extradición es “un legado de la era Trump” y representa “una amenaza” para la democracia y la prensa, dijo a la AFP. Sus seguidores lo presentan como un mártir de la libertad de prensa.

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Stella Assange, quien es abogada, estimó que podría ser extraditado en unas semanas. El gobierno británico aceptó su extradición en junio de 2022, pero Julian Assange apeló. Durante la conferencia de prensa, su esposa explicó que este recurso fue rechazado hace aproximadamente un mes pero que se presentó una nueva solicitud de revisión. “Así que hay una última oportunidad”, dijo. Si la petición tiene éxito, el caso podría ir a una audiencia pública ante dos nuevos jueces del Tribunal Superior.

De lo contrario, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) podría ser la última opción para salvar a Assange de la extradición. Según su esposa, el estado de salud del fundador de WikiLeaks “se está deteriorando”, rap/elant que había sufrido en 2021 de un “micro derrame cerebral”.