(Ginebra) Los dos bandos de generales rivales que se enfrentan en Sudán utilizan el hambre como «arma de guerra», afirmaron el miércoles expertos de la ONU, añadiendo que los gobiernos extranjeros que les ayudan son cómplices de «crímenes de guerra».

La guerra en Sudán se libra desde abril de 2023 entre el ejército regular, liderado por el general Abdel Fattah al-Burhan, y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), liderados por su ex adjunto Mohamed Hamdan Daglo.

Cuatro expertos independientes de la ONU han destacado que más de 25 millones de civiles se encuentran en una situación de casi hambruna y con una necesidad urgente de asistencia humanitaria.  

“El ejército regular y las RSF utilizan los alimentos como arma y para matar de hambre a los civiles”, aseguraron los expertos, entre ellos el relator especial sobre el derecho a la alimentación.

Mencionaron el asedio de El Fasher, capital del estado de Darfur del Norte, la única capital de los cinco estados de Darfur que no está en manos de las RSF, que amenaza a cientos de miles de civiles presas del hambre y la sed.

Pidieron a ambas partes que «dejen de bloquear, saquear y explotar la ayuda humanitaria».

Los esfuerzos locales para tratar de responder a la crisis se han visto socavados por una violencia sin precedentes, pero también por ataques dirigidos a los trabajadores de rescate, dijeron.

«Los ataques deliberados contra trabajadores humanitarios y voluntarios locales han socavado las operaciones de asistencia humanitaria, poniendo a millones de personas en riesgo de morir de hambre», dijeron.

Los expertos sostuvieron que “los gobiernos extranjeros que brindan ayuda financiera y militar a ambos lados del conflicto son cómplices de la desnutrición, los crímenes contra la humanidad y los crímenes de guerra”.

Los expertos pidieron a las partes en conflicto que acuerden un alto el fuego inmediato y conversaciones políticas inclusivas.

También pidieron a la comunidad internacional «acelerar la acción humanitaria».

“Es imperativo que la ONU, los donantes internacionales y los Estados aceleren los esfuerzos para aliviar el sufrimiento de millones de sudaneses que sufren desnutrición”, dijeron.