Al menos cuatro personas murieron en el derrumbe, el lunes 6 de mayo, de un edificio en construcción en George, en la costa sudafricana, en el que una cincuentena de trabajadores quedaron atrapados, anunció el martes el municipio. En total, 24 personas fueron rescatadas de los escombros y la mayoría hospitalizadas, anunció el municipio. Cuatro de ellos murieron a causa de las heridas. Todavía hay «51 personas desaparecidas», atrapadas bajo los escombros, precisa el comunicado de prensa publicado la noche del lunes al martes.
Los rescatistas, divididos en equipos, concentraron sus esfuerzos en “tres zonas distintas” de los escombros del edificio derrumbado. «Un equipo de trabajo de 75 personas se encontraba en el lugar en el momento del derrumbe» de este edificio en construcción, poco después de las 14.00 horas, afirmó la portavoz del municipio, Chantel Edwards.
Las empresas constructoras implicadas en el proyecto están trabajando con las autoridades para establecer una lista precisa de las personas de las que aún no se ha sabido nada, precisa la ciudad. Mario Ferreira, portavoz de la ONG Gift of the Givers, presente en el lugar del accidente, dijo a la AFP que los socorristas se habían «comunicado con determinadas personas bajo los escombros».
El edificio de cinco pisos, incluido un estacionamiento subterráneo, se derrumbó por razones que aún no están claras. Las fotografías del desastre muestran una obra arrasada, alrededor de la cual se encuentran desplegados numerosos servicios de emergencia. El tejado del edificio permanece visible, tembloroso, sobre un montón de escombros.
Fuertes focos iluminan el lugar, que ha sido aislado por un perímetro de seguridad para proteger a los residentes locales. A primera hora de la tarde, una excavadora estaba trabajando. Las operaciones de rescate continuaron durante toda la noche. Se creó un puesto operativo para coordinar los distintos servicios de emergencia que acudieron al lugar, procedentes de varias localidades de los alrededores e incluso de la ciudad de Ciudad del Cabo, situada a más de 400 kilómetros al oeste de la catástrofe. En total, alrededor de un centenar de socorristas trabajaban en el lugar del accidente.
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Varios servicios de emergencia se enteraron más tarde de que también salieron a la carretera máquinas excavadoras, así como perros rastreadores y sus adiestradores, que llegaron al lugar durante la noche, según informó el municipio. Las familias y seres queridos fueron invitados a reunirse en el ayuntamiento, cerca del edificio derrumbado, donde fueron atendidos, en particular por trabajadores sociales, informó el municipio. «Nuestros pensamientos están con las familias y todos los afectados, que siguen esperando noticias de sus seres queridos», dijo el alcalde Ald Van Wyk en un comunicado.
George es una ciudad de tamaño medio, de unos 160.000 habitantes, situada cerca de la muy turística Ruta Jardín, que recorre la costa sur del país. Su ayuntamiento está dirigido por el principal partido de oposición del país, la Alianza Democrática (DA), que también gobierna la provincia de Cabo Occidental.
