El gigante mediático francés Vivendi anunció este domingo 5 de noviembre su intención de “utilizar todos los medios legales a su disposición” para “impugnar” la decisión “ilegal” del consejo de administración de Telecom Italia (TIM) de vender su red fija a el fondo de inversión estadounidense KKR. Con el 23,75% de las acciones, es el principal accionista.

«Los derechos de los accionistas de Telecom Italia han sido pisoteados», afirmó Vivendi en un comunicado de prensa, que había convocado en vano una junta general extraordinaria de accionistas para decidir sobre la oferta. «El consejo de administración de Telecom Italia ha privado así a cada accionista del derecho a expresar su opinión en una junta, así como del correspondiente derecho de retirada para los accionistas en desacuerdo», señala Vivendi, principal accionista del grupo italiano con una cuota del 23,75%.

El consejo de administración de Telecom Italia aprobó el domingo la oferta en firme por su red fija presentada por KKR, asociada al gobierno de Meloni. La oferta valora la red en 18.800 millones de euros, excluyendo Sparkle, filial especializada en cables submarinos, y el importe total de la transacción puede alcanzar los 22.000 millones de euros, bajo determinadas condiciones, explica TIM. Esta propuesta está lejos de las expectativas de Vivendi, que apostaba por 31 mil millones de euros.

«Cinco dictámenes jurídicos han confirmado que la transferencia de toda la red de infraestructura» de Telecom Italia habría «requerido una modificación previa de los estatutos de Telecom Italia, una decisión que corresponde únicamente a la junta general extraordinaria de accionistas», argumenta Vivendi.

«Siempre estamos abiertos al diálogo y a las propuestas que nos presenten, en particular los mayores accionistas», aseguró Pietro Labriola, director general de Telecom Italia. “Volvamos a trabajar” para implementar esta “importante e histórica decisión de la junta hoy”, dijo en un comunicado.

Si el proyecto llega a buen término, a pesar de los numerosos obstáculos que aún quedan por superar, Telecom Italia se convertiría en el primer gran operador de Europa en dar el paso y separarse de su red fija para reducir su pesada deuda: 14 mil millones de euros.