«Proteger Sfax»: el domingo, varios cientos de manifestantes protestaron en Sfax contra la presencia de inmigrantes subsaharianos ilegales. Segunda ciudad y centro económico de Túnez, es el principal punto de partida de los inmigrantes hacia Italia.
Los manifestantes se concentraron frente a la prefectura de la ciudad a la convocatoria de un movimiento local, «Pavimento Sayeb», señaló un corresponsal de la AFP. El presidente de este movimiento, Zied Mallouli, considera la presencia de inmigrantes ilegales como «una amenaza para la seguridad de los habitantes de Sfax».
Sfax es el punto de partida de un gran número de cruces ilegales de inmigrantes clandestinos a Italia. Sus habitantes han criticado a menudo la presencia “creciente” de inmigrantes ilegales y han pedido su salida.
Los llamamientos contra la presencia de inmigrantes ilegales en Túnez se han multiplicado tras un discurso del 21 de febrero del presidente Kais Saied criticando la inmigración ilegal y presentándola como una amenaza demográfica para su país.
Después de este discurso se registraron casos de ataques contra migrantes del África subsahariana.
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Varias ONG locales e internacionales denunciaron entonces “los discursos de odio e intimidación contra los migrantes (del África subsahariana) difundidos en las redes sociales que contribuyen a la movilización contra los grupos más vulnerables y alimentan conductas violentas contra ellos”.
A finales de mayo, un migrante beninés de 30 años murió apuñalado en un ataque perpetrado por un grupo de jóvenes tunecinos en un barrio obrero de Sfax.
La mayoría de los inmigrantes de los países del África subsahariana llegan a Túnez para luego intentar emigrar por mar a Europa, desembarcando ilegalmente en las costas italianas.
Túnez atraviesa una grave crisis político-económica que también empuja a muchos tunecinos a intentar llegar ilegalmente a Europa por mar arriesgando su vida.
