Aquí tienes algunos consejos si estás a punto de jugar tu primer partido con tus nuevos colores. Empieza marcando un hat-trick fuera de casa, déjate llevar a 38 km/h y revive a tu equipo en un partido sin suspense. Esta es la receta que siguió el inglés Henry Arundell. Segundo mejor anotador de try del Mundial (7), el extremo supersónico disputó su primer partido con el Racing 92. Y en un partido donde toda esperanza de suspense parecía muerta, su hat-trick revivió completamente a su equipo, permitiéndoles igualmente obtener un valioso punto que les permitirá volver al podio. El derbi contra el Stade Français, el próximo fin de semana en Jean-Bouin, sería la oportunidad ideal para entrar definitivamente en el corazón de los aficionados de Ile-de-France.

¡Qué actuación de la tercera fila del ala Toulon! Autor de catorce entradas (una fallida), el francés estuvo en el horno y en el molino. Sobre todo, supo frenar los ataques de Isla de Francia en los momentos más candentes del partido. Su scratch en el minuto 79, para detener una de las ofensivas finales de Fickou y sus compañeros, se celebró como una victoria. Si bien los toulonnais han tenido un comienzo de temporada complicado, el estado de ánimo del exjugador del Brive ha hecho mucho bien a su equipo. También firmó una asistencia en el primer try del partido, y estuvo en partido en el tercero.

Si los hombres de Pierre Mignoni no han viajado bien desde el inicio de la temporada, en casa la historia es completamente diferente. Los Rojos y Negros se sobrepusieron a la ausencia de sus internacionales franceses (Ollivon y Villière de vacaciones) para lograr un triunfo prestigioso ante el tercero del Top 14. Una actuación que no habían logrado en casa en las dos últimas temporadas. Como resultado, en tres partidos jugados en Mayol, los sureños ganaron muchos puntos al ganar tres veces. Ahora tendremos que conseguir exportarnos para aspirar a llegar a la fase final. Próxima reunión, el próximo sábado en Clermont.

fracasos

Aprovechando el regreso de varios de sus globalistas, y en particular de sus tricolores Woki y Fickou, los Racingmen viajaron a Toulon con muchas ambiciones. Pero la primera parte no les permitió esperar nada mejor que una derrota en Mayol. Indisciplinados, fallando demasiadas entradas, Ciel et Blanc permitieron a sus oponentes facilitar el partido. Pese al primer try de Arundell, regresaron al vestuario con una desventaja de 16 puntos (23-7 al descanso). Un retraso que su buena segunda parte no supo compensar.

Baptiste Serin casi habría merecido aparecer en lo más alto. En su estilo de juego habitual, el medio scrum anotó un try tramposo y estuvo en todos los lugares correctos hasta su salida (56º). En cuanto a Lolesio, se inspiró en varias ocasiones, pese a un toque fallido al final del partido. Pero la bisagra de Toulon planteaba un problema importante. Frente a los polacos, los dos goleadores lograron 4 de ocho tiros. Demasiado poco para un partido de este nivel. Los 11 puntos que quedaban en juego podrían haberle costado caro a los toulonnais, que vieron a su rival acercarse peligrosamente al final del partido. La ausencia de Biggar se hizo sentir en Mayol.

Establecido como lateral, Max Spring no tuvo éxito en el césped de Toulon. Ofreció el segundo intento en una meseta a los Rouge et Noir, después de dejarse engañar en el rebote y conceder un toque evitable. Paia’aua lo atrapó por poco en la primera mitad, cuando intentaba anotar un try en la esquina. Detalles que no permitieron al Racing ganar fuera de casa.