Le Figaro Niza

Un «episodio mediterráneo» provocó la caída de 119 milímetros de agua sólo en la ciudad de Niza (Alpes Marítimos) en un día, una precipitación récord que provocó deslizamientos de tierra y desprendimientos de tierra en diferentes barrios a principios de semana. A raíz de estos incidentes, el alcalde de la capital de la Riviera, Christian Estrosi (Horizontes), escribió al Ministro del Interior, Gérald Darmanin, para pedirle «que reconozca el estado de catástrofe natural por el fenómeno del movimiento del suelo». “Necesitamos este reconocimiento para que las aseguradoras asuman su responsabilidad”, explicó el concejal.

Según los distintos informes meteorológicos, no había llovido tanto en 24 horas (entre el domingo y el lunes) en Niza desde 1947, cuando comenzaron los registros. Este es uno de los inviernos más húmedos desde hace mucho tiempo en toda la Costa Azul, que sin embargo lo necesitaba mucho. El año pasado, al mismo tiempo, comenzaron a tomarse restricciones en el uso del agua debido a la sequía.

Las últimas malas condiciones meteorológicas han permitido incluso la vuelta de la nieve en altura, casi inesperada en determinadas estaciones como la de Roubion. Pero en la zona costera y en la zona alta de Niza, causaron algunos daños que movilizaron a los bomberos y a los servicios de la metrópoli. Varias carreteras quedaron cortadas temporalmente tras los desprendimientos de tierra, así como túneles cerrados por estar inundados.

Durante la noche del lunes al martes, una caída de 500 m3 de tierra en Chemin du Vallon Sabatier, en Niza, dañó parcialmente un hangar, afortunadamente, deshabitado. Este deslizamiento de tierra también sepultó cuatro vehículos y un vehículo pesado. A poca distancia, 14 viviendas estaban amenazadas y para seis de ellas se habían emitido órdenes de peligro inminente como medida de precaución. Ocho personas tuvieron que ser realojadas por el municipio de Niza.

Como no se ha podido hacer referencia a todos los daños tras estas lluvias intensas y, sobre todo, continuas – algo bastante raro en los Alpes Marítimos -, Christian Estrosi invitó a sus ciudadanos a escribir al departamento de grandes riesgos de la ciudad con elementos que ilustran y describen los daños. El sol debería regresar la próxima semana.