Una leyenda enojada. Jean-Claude Killy, tres veces campeón olímpico de esquí alpino, lamenta la decisión de eliminar Val d’Isère del mapa de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030. “Estoy entristecido y escandalizado”, escribe “El rey Killy”, de 80 años.

El miércoles, el Comité Olímpico Internacional decidió aceptar únicamente la candidatura de los Alpes franceses. Val d’Isère acogería con toda probabilidad los slaloms de esquí alpino y en Isola 2000 el boardercross. Historia antigua: a petición del COI, el mapa está evolucionando. “Hemos desechado así, sin análisis, sin consulta y sin base racional, toda una sección de la historia del esquí. […] Nadie, en todos los intercambios que he tenido en las últimas horas, se hace responsable de ello”, lamenta Jean-Claude Killy.

El nativo de Saint-Cloud cree que el esquí alpino, “simbolizado por dos disciplinas, la velocidad y la técnica”, puede “vivir en dos sitios”. Según él, Val d’Isère debería permanecer en el mapa de los Juegos debido a “la excelencia de sus pistas y de todas sus infraestructuras existentes y consolidadas, su experiencia organizativa, su sólida historia y su pasión por el esquí, la competición y el Olimpismo”.