Luchando contra un virus intestinal, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, suspendió este viernes su campaña electoral por tercer día consecutivo, a dieciséis días de las elecciones presidenciales y legislativas que prometen ser disputadas.
Según el programa comunicado por la Presidencia turca, el jefe de Estado, de 69 años, hablará únicamente por videoconferencia al final de la tarde desde el palacio presidencial en Ankara con motivo de la inauguración de un puente en Adana (Sur).
Recep Tayyip Erdogan, en el poder durante 20 años, canceló todos sus viajes desde el martes por la noche, incluido uno para la muy esperada inauguración de la primera planta de energía nuclear de Turquía.
El presidente turco se vio obligado a intervenir este jueves por videoconferencia para la inauguración de la central eléctrica de Akkuyu (Sur), sentado y con los rasgos demacrados, su primera aparición en directo en televisión en casi 48 horas. «Va bien. Los efectos de su gastroenteritis han disminuido. Quiere reanudar su programa lo antes posible”, dijo el jueves por la tarde el ministro de Salud de Turquía, Fahrettin Koca.
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Recep Tayyip Erdogan se vio obligado el martes por la noche a interrumpir una entrevista televisiva en vivo, en medio de una pregunta de un periodista. El jefe de Estado, de tez pálida, reapareció en el aire un cuarto de hora después antes de truncar la entrevista explicando que había cogido una “gripe estomacal”.
El episodio cae mal para el presidente turco, que pretendía alinear dos o tres encuentros diarios en la recta final antes de la doble vuelta del 14 de mayo. Su principal oponente, Kemal Kiliçdaroglu, deberá encadenar dos encuentros el viernes, en Giresun (Noroeste) y Kocaeli (Noroeste).
A la cabeza de una alianza de seis partidos, la mayoría de las encuestas otorgan a Kemal Kiliçdaroglu una buena posición frente al presidente Erdogan.
