Una oleada de detenciones por parte de la policía turca provocó la detención de una cincuentena de personas, entre ellas un periodista de la AFP, este domingo en Estambul, al margen de las celebraciones del Año Nuevo kurdo. Eylul Yasar, periodista del servicio de vídeo de la AFP, se disponía a filmar las celebraciones del Nowrouz, el Año Nuevo kurdo, cuando fue detenida en un puesto de control. Finalmente fue liberada por la policía al final del día después de permanecer retenida durante más de seis horas. La periodista anunció su liberación y la de catorce personas encerradas al mismo tiempo que ella en la misma furgoneta.
Según periodistas y abogados presentes, miembros de la Asociación de Abogados por la Libertad (ÖHD), la camarógrafo se opuso a un registro corporal que consideró «demasiado insistente» y fue trasladada en una furgoneta policial.
«Sabemos que catorce personas detenidas han sido liberadas», confirmó a la AFP Emine Özhasar, abogada de la asociación MLSA, que reúne a abogados de derechos humanos y a los medios de comunicación. «Muchas personas han sido arrestadas pero aún no sabemos el número total», añadió.
Según Erol Önderoglu, corresponsal de RSF en Turquía, también fueron detenidas en el lugar unas cincuenta personas que acudían a asistir a las celebraciones de Nowrouz, generalmente acompañadas de bailes tradicionales y una gran hoguera. La hoguera fue cancelada, constató también un fotógrafo de la AFP.
Los kurdos, que representan aproximadamente una quinta parte de los 85 millones de habitantes de Turquía, enfrentan una discriminación significativa en el país. La antigua figura destacada del principal partido prokurdo HDP (ahora DEM), Selahattin Demirtas, está encarcelado desde 2016 por “propaganda terrorista” y más de un centenar de alcaldes de localidades kurdas vieron canceladas sus elecciones en las últimas elecciones municipales de 2019. .