Militantes del Ejército de Liberación de Baluchistán (ALB) atacaron un convoy que transportaba ingenieros chinos en el puerto de Gwadar, en el suroeste de Pakistán, financiado por Beijing, el domingo (13 de agosto).
“La Brigada Majeed del ALB atacó hoy un convoy de ingenieros chinos en Gwadar. El ataque continúa”, dijo el grupo separatista en un comunicado. Fuentes de seguridad han confirmado el ataque a un convoy que transportaba ingenieros chinos, pero hasta el momento no ha habido una respuesta oficial.
Sarfaraz Ahmed Bugti, senador y exrepresentante del ministro del Interior de la provincia, dijo en la red social X (anteriormente Twitter) que ningún ciudadano chino murió en el ataque. “Condeno enérgicamente el atroz ataque terrorista perpetrado contra un convoy de trabajadores chinos en Gwadar”, denunció el senador.
«Afortunadamente no hubo víctimas, pero según algunos informes, la emboscada fue repelida y los atacantes murieron», dijo. La radio estatal paquistaní, citando al departamento de comunicaciones del ejército, dijo que la situación estaba bajo control. «Un terrorista murió y otros tres resultaron heridos durante un intercambio de disparos entre las fuerzas de seguridad y los terroristas en Gwadar», transmitió.
Varios grupos separatistas baluchis han reivindicado en el pasado varios ataques a proyectos relacionados con el enorme proyecto del Corredor Económico China-Pakistán (CPEC). Miles de personal de seguridad están desplegados para contrarrestar las amenazas contra los intereses de Beijing. El CPEC es la piedra angular de un vasto proyecto de infraestructuras para el que China deberá gastar más de 50.000 millones de dólares (42.000 millones de euros).
Leer tambiénChina y Pakistán celebran 10 años de su asociación, piedra angular de las “nuevas rutas de la seda”
Estos proyectos chinos a menudo han creado un fuerte resentimiento en la provincia, especialmente con los grupos separatistas que creen que la población local no se beneficia de ellos, y que la mayoría de los puestos de trabajo son para trabajadores chinos. En mayo de 2019, el hotel de lujo con vista al puerto de Gwadar en el Mar Arábigo ya había sido atacado y al menos ocho personas habían muerto. Más recientemente, en abril de 2022, tres académicos chinos y su chofer paquistaní murieron cuando una mujer se inmoló cuando ingresaban al Instituto Confucio de la Universidad de Karachi.
Estos ataques fueron reivindicados por el Ejército de Liberación de Baluchistán, que se justificó invocando el control de los recursos locales por parte de Islamabad y China. Baluchistán es la provincia menos poblada de Pakistán, pero es rica en recursos minerales. El viceprimer ministro chino, He Lifeng, estuvo en la capital de Pakistán el mes pasado para conmemorar el décimo aniversario de CPEC.
