Un joven de 17 años, detenido en el centro de detención preventiva de Bonneville, en Alta Saboya, aprovechó un traslado médico para escapar el domingo y todavía no había sido encontrado el lunes 25 de diciembre, según supo la fiscalía de Annecy.
“Esto ocurrió alrededor de las 15:30 horas, cuando regresamos al centro de detención preventiva. Acababa de ser examinado (nota del editor: en un centro hospitalario) y no tenía nada. Aprovechó la apertura de la puerta corredera del vehículo penitenciario para que el conductor subiera y huyera», explicó a la AFP la fiscal Line Bonnet.
El joven acusado, que lleva una semana en prisión preventiva en la sección de menores por robo a mano armada, “fue abandonado a pie en una zona rural, sin cómplice, desarmado y parcialmente atado con una muñeca esposada al cinturón”, añadió el magistrado. El fugitivo “sería bastante peligroso”, afirmó a la AFP una fuente cercana al caso.
Inmediatamente se puso en marcha un “gran sistema de gendarmería” para encontrarlo con el apoyo, en particular, de “un dron con visión térmica y perros rastreadores”, según el fiscal. Una cuarentena de gendarmes seguían movilizados sobre el terreno el lunes y en las redes sociales se publicó una convocatoria de testigos acompañada de una fotografía del joven, indicó la gendarmería.