Estados Unidos espera obtener esta semana de unos 40 países aliados que se comprometan a no pagar más dinero en el futuro en caso de un ataque de “ransomware”, indicó el martes en un comunicado el asesor de la Casa Blanca. Un total de 48 países, a los que se unirán la Unión Europea y la Interpol, podrían firmar una declaración conjunta en este sentido durante una cumbre que se celebrará el martes y el miércoles en Washington, afirmó Anne Neuberger, responsable de cuestiones de ciberseguridad en el Consejo de Seguridad Nacional, durante una conferencia entrevista con periodistas.
“Aún estamos ultimando las firmas de cada miembro, pero ya casi llegamos”, aseguró una fuente cercana al ejecutivo estadounidense. La administración del presidente Joe Biden lanzó hace dos años una iniciativa internacional para coordinar mejor la lucha contra el “ransomware”, estos ataques informáticos dirigidos tanto a empresas como a servicios y administraciones públicas.
El “ransomware” son programas maliciosos que, una vez introducidos en el sistema informático de un hospital o de una escuela, por ejemplo, hacen que los datos sean ilegibles. Para restaurar el funcionamiento de las entidades objetivo, los piratas informáticos detrás del ataque generalmente exigen el pago de un rescate en bitcoins u otras criptomonedas.
Estados Unidos es el país más afectado, recordó Anne Neuberger, con “el 46% de los ciberataques del mundo dirigidos” contra personas o entidades estadounidenses. “Mientras el dinero siga fluyendo hacia los ciberdelincuentes, este (fenómeno) seguirá creciendo”, afirmó. La Casa Blanca se basa en las previsiones de los expertos según las cuales el coste total de estos ataques de “ransomware” alcanzará los 71,5 mil millones de dólares en 2026, frente a los 20 mil millones en 2021.