El gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro presentará al Parlamento un proyecto de “ley contra el fascismo” destinado a sancionar a los opositores que, según él, hayan promovido “actos de violencia”. Nicolás Maduro, que se espera que se postule para un tercer mandato consecutivo de seis años a finales de julio, a menudo se refiere a sus oponentes como “fascistas” o “extrema derecha”. Inició un trámite para presentar “un proyecto de ley contra el fascismo y cualquier expresión neofascista en el ejercicio de la política y la vida nacional”, escribió en X la vicepresidenta Delcy Rodríguez.

“Es una respuesta a la violencia que vivió el país en 2014, 2015 y 2017”, añadió, refiriéndose a las manifestaciones antigubernamentales que dejaron más de un centenar de muertos. En 2017, Nicolás Maduro, entonces cuestionado por manifestaciones que dejaron más de 125 muertos, ya había propuesto una “ley contra el odio, la convivencia pacífica y la tolerancia”, instrumento que la oposición acusa de criminalizar la disidencia. Las primeras condenas en aplicación de esta ley en 2018 se referían a dos personas que protestaban contra la falta de alimentos.