La visita del secretario de Estado de los Estados Unidos a Panamá fue un evento de gran importancia diplomática y protocolar que capturó la atención de todos los medios locales. Marco Rubio, el 72.° secretario de Estado de Estados Unidos, decidió elegir a Panamá como su primera parada en su primer viaje internacional por Centroamérica y el Caribe. Esta visita no solo generó expectativas en términos de relaciones bilaterales, sino que también fue un momento de alto interés para los panameños que seguían de cerca cada paso de Rubio en suelo panameño.
Marco Rubio aterriza en Panamá
El sábado 1 de febrero, la llegada de Marco Rubio al Aeropuerto Internacional de Tocumen fue un momento lleno de expectativas y protocolo. Bajando de su avión con la seriedad que caracteriza a los altos funcionarios de gobierno, Rubio fue recibido por una comitiva oficial encabezada por el canciller de la República, Javier Martínez-Acha. Las cámaras capturaron cada gesto y saludo, mientras Rubio se adentraba en territorio panameño, marcando así el inicio de una visita que prometía ser intensa y significativa.
Encuentros y protocolo en Panamá
Durante su estadía en Panamá, Marco Rubio no solo se limitó a reuniones diplomáticas y encuentros oficiales. El domingo 2 de febrero, el secretario de Estado asistió a una eucaristía en la Iglesia Nuestra Señora de la Merced en el Casco Antiguo. Rodeado de un fuerte dispositivo de seguridad, Rubio se tomó fotos con los feligreses, mostrando así un lado más humano y cercano en medio de su apretada agenda. Posteriormente, se trasladó a la Presidencia de la República, donde fue recibido nuevamente por el canciller Javier Martínez-Acha, en un gesto de continuidad y cordialidad en las relaciones interinstitucionales.
Adentrándose en la sede del gobierno panameño, Marco Rubio fue recibido por el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, quien le dio la bienvenida a la casa presidencial en un gesto de cortesía y hospitalidad. Durante su visita, el presidente Mulino presentó a su equipo de trabajo ante el secretario de Estado Marco Rubio, reafirmando así el compromiso de Panamá con mantener relaciones sólidas y fructíferas con Estados Unidos. La imagen de Rubio junto al presidente Mulino y su equipo de gobierno en la sede presidencial quedará grabada en la memoria de todos los presentes como un símbolo de la importancia de la diplomacia y el diálogo en las relaciones internacionales.
En resumen, la visita de Marco Rubio a Panamá fue un acontecimiento de relevancia tanto a nivel político como humano. A través de gestos protocolares y encuentros cercanos con la comunidad, Rubio logró transmitir un mensaje de colaboración y entendimiento entre ambas naciones. Su paso por Panamá sentó las bases para futuras interacciones y acuerdos bilaterales que sin duda fortalecerán los lazos entre Estados Unidos y Panamá en el futuro.
