La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, pronunciará su discurso sobre el Estado de la Unión el miércoles 13 de septiembre en Estrasburgo, donde defenderá su trayectoria, con el Pacto Verde en mente, incluso si este último sigue sin terminar y es una fuente de tensión a menos que transcurra un año de las elecciones europeas. Les manœuvres politiques ont commencé en vue du scrutin de juin 2024, qui donnera le coup d’envoi d’un grand chamboulement à la tête des institutions de l’UE, et les spéculations courent sur la volonté de la responsable allemande conservatrice de rempiler pour cinco años.
En su discurso anual ante el pleno de los eurodiputados, Ursula von der Leyen debería hacer hincapié en su acción frente a la guerra en Ucrania, la crisis energética o la regulación de los gigantes digitales, así como en los expedientes sobre la mesa para la finalizar el mandato.
Tema crucial sobre el que se examinarán sus palabras: la ampliación de la UE. La Comisión debe presentar en otoño sus recomendaciones sobre la apertura de negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia, que obtuvieron el estatus de candidatos en junio de 2022. Cinco países de los Balcanes Occidentales también son candidatos a la adhesión y, algunos de ellos, en negociaciones con la UE para un década.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, reaccionó de manera notable al afirmar que la UE debe estar preparada para integrar nuevos miembros “de aquí a 2030”. «Si queremos ser creíbles, tenemos que hablar de calendarios», afirmó. Ursula von der Leyen apoya la necesidad de que la UE se prepare para la ampliación, pero sin fijar un plazo: «La credibilidad está garantizada por un proceso técnico, el presidente considera importante preservarla», subraya un responsable europeo.
En el balance, Ursula von der Leyen puede presumir de haber logrado gran parte del ambicioso Pacto Verde destinado a reducir las emisiones de carbono de la UE. Pero esto último sigue inconcluso: quedan 37 textos en negociación, algunos de los cuales «restauración de la naturaleza», control de pesticidas… suscitan la oposición de su propia familia política, el PPE (derecha), que pide una «pausa» en verde. legislación y denuncia la “carga” regulatoria impuesta a agricultores y empresas.
Una fuente de “euroescepticismo” preocupa incluso a la presidenta del Parlamento del PPE, Roberta Metsola, en un contexto de ascenso de la extrema derecha en Europa. «La competitividad, menos burocracia y más comercio son una prioridad», afirma el líder del PPE, Manfred Weber.
El reciente apoyo de Ursula von der Leyen a una revisión del estatus de especie protegida concedido al lobo es interpretado por algunos como una señal para el mundo rural y para su propio partido.
«Estamos pasando de la fase de desarrollo legislativo a la fase de aplicación», lo que requiere «más diálogo» con los ciudadanos y las empresas, subraya el responsable europeo ya citado. El presidente (Renew, liberales) de la comisión parlamentaria de Medio Ambiente, Pascal Canfin, espera sin embargo que el responsable “reafirme la ambición del Pacto Verde”, en particular en materia climática, tres meses antes de la COP28 y mientras Bruselas fijará en primavera su Objetivo 2040 de reducción de gases de efecto invernadero, “un momento clave para seguir mostrando ambición”.
Ursula von der Leyen “tiene eso en mente, pero está obligada a tener en cuenta el hecho de que estamos entrando en la parte difícil de la transición ecológica, con un cierto número de actores, empezando por el PPE, que dicen: no vayamos demasiado rápido, no demasiado lejos”, se preocupa.
«Le pedimos que no abandone las ambiciones marcadas al inicio de su mandato» frente a «fuerzas políticas que presionan por el status quo», añade la presidenta de los socialdemócratas Iratxe García Pérez, al unísono con los Verdes. Entre los expedientes que quedan por completar, la reforma del mercado eléctrico y la de las normas presupuestarias europeas son objeto de intensas negociaciones. Sobre todo, la espinosa reforma de la política migratoria está suscitando debates difíciles, en un contexto de capacidades de acogida presionadas ante el aumento de las solicitudes de asilo.
Ursula von der Leyen debería pedir a los eurodiputados y a los estados que intensifiquen sus esfuerzos para finalizar el texto. También espera que el memorando de entendimiento para una “asociación estratégica” firmado en julio con Túnez se convierta en un modelo para futuros acuerdos con países de la región.
El discurso de Ursula von der Leyen se produce cuando su Comisión perdió recientemente a dos figuras emblemáticas: Frans Timmermans, arquitecto del Pacto Verde y ahora candidato a primer ministro en los Países Bajos, y a la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, que se postula para el cargo de jefa de Inversiones Europeas. Banco.