El Ministerio de Cultura indicó el martes 11 de abril que tenía previsto invertir 220 millones de euros hasta finales de año para restaurar y reforzar la seguridad de 87 catedrales de su propiedad. Cuatro años después del incendio que asoló Notre-Dame de París, 15 de abril de 2019.
La ministra de Cultura, Rima Abdul Malak, de visita en la catedral de Amiens el martes, anunciará la aceleración de un “plan de seguridad de la catedral” lanzado tras el incendio del 15 de abril de 2019.
“En 2021 y 2022, el Ministerio de Cultura dedicó más de 167 millones de euros a las catedrales, incluidos 25 millones de euros para su seguridad”, dijo el ministerio en un comunicado de prensa antes de la visita. Este proyecto se “ampliará” con la movilización “en 2023 de un presupuesto de 52 millones de euros para catedrales (excluida Notre-Dame de París)”, incluidos 12 millones para seguridad contra incendios y 40 millones para trabajos de restauración. Las catedrales de Clermont-Ferrand y Beauvais han iniciado así grandes proyectos. También se realizaron campañas de trabajo en las catedrales de Orleans, Rodez, Puy-en-Velay y Dijon.
Notre-Dame de París, cuya obra moviliza a 500 personas cada día, debería recuperar su famosa aguja antes de fin de año para una probable reapertura a finales de 2024. Cámaras térmicas, tabique del ático para frenar la propagación del fuego , eliminación de ‘instalaciones eléctricas innecesarias, columnas secas para facilitar la intervención de los bomberos: las medidas de seguridad están aumentando en estos edificios, implementadas por las direcciones regionales de asuntos culturales.
“¡En tres años se ha hecho mucho más que en treinta años!” aseguró el ministro en una entrevista publicada en línea el domingo por la noche por el periódico La Croix, al tiempo que reconoció que solo 53 catedrales están actualmente equipadas con detección de incendios y monitoreo remoto. “Hasta 2019 parece una locura, pero solo se tenía en cuenta la cuestión de la seguridad de las personas en caso de incendio. No la del patrimonio. Por lo tanto, podemos hablar de una verdadera revolución en el enfoque”.
Así, 66 catedrales cuentan ya con planes de evacuación de bienes culturales para proteger obras en caso de catástrofe, frente a los 13 de 2019 -y se están elaborando otros-. Si se ha elevado el nivel de seguridad, con la mayoría de las catedrales a la altura, tres de ellas “requieren un esfuerzo especial: las de Bayona, Rennes y Aire-sur-l’Adour”, ha detallado la ministra.