NUEVA YORK. Una Donald Trump soporífero y casi aburrido intervino hoy en la 74 edición de la Asamblea general de la Onu. Después de una apertura sovranista en el que él ha tejido en las alabanzas de su mandato con respecto al empleo y la economía, la liquidación de los partidarios de la globalización como «perdedores», sin futuro, el presidente estadounidense ha dado el paso a sus diatribas en contra de China e Irán.

«Los días de abuso en el ámbito comercial terminado», dijo, En los últimos años, estos abusos han sido tolerados, ignorado, si no se anima. Con respecto a los estados unidos, esos días se han ido». Luego Trump ha hablado acerca de la situación de Hong Kong, al señalar que su administración sigue muy de cerca la manera en que China está afrontando esta crisis: «El mundo espera un firme creyente de que el gobierno chino respete los tratados en que el obligado y proteger la libertad y el sistema de vida democrática en la ex colonia británica».