La tienda de descuento de origen alemán Lidl atacó el viernes en un anuncio en las redes sociales al líder de la distribución alimentaria en Francia E.Leclerc, acusándolo de «comparar lo incomparable» para presentarse como la marca más vendida en términos de precio.
Lidl, que se ha beneficiado mucho menos que E.Leclerc de la preocupación de los franceses por el aumento de los precios de sus alimentos, propuso una comparación entre sus cereales y los de primera gama de precios de su competidor. Menos caros, los cereales E.Leclerc contienen, afirma Lidl, “un 49% menos de trigo y un 40% menos de cacao” que sus propios cereales. Y la tienda de descuento dice que está “dispuesta a todo para ofrecerle los mejores precios pero sin hacerle tragar nada”.
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Para el experto del sector de la distribución Olivier Dauvers, se trata de un “nuevo episodio en la batalla publicitaria entre Lidl y Leclerc”, que “alcanza niveles (de agresividad) nunca antes vistos”. Se produce en un contexto de fuerte competencia entre distribuidores, exacerbada por la inflación, que ha reforzado el interés de los consumidores por los precios bajos, reales o percibidos como tales. El grupo independiente E.Leclerc, líder del sector con casi una cuarta parte del mercado, se benefició de un impresionante aumento de cuota de mercado en 2023.
Entre los argumentos esgrimidos para intentar convencer a nuevos clientes, los distribuidores utilizan la publicidad comparativa utilizando metodologías variables (comparación local o nacional, sobre todo o parte del surtido, etc.) que les permite demostrar que son menos costosos que la competencia. El jueves en BFMTV/RMC, el presidente de Lidl Francia, Michel Biero, declaró que E.Leclerc, que «lanzó estos comparadores, dio un paso» que «nunca había dado antes», al comparar «productos de marcas de distribuidor con precios bajos, aunque no sean productos comparables” desde el punto de vista de la calidad, según él.
