El exclusivo club de campeones del mundo, como jugadores y entrenadores, sólo tenía tres miembros. Dos murieron a los pocos días, primero el brasileño Mario Zagallo y luego el alemán Franz Beckenbauer. “Me enteré con inmensa tristeza de la muerte de Franz Beckenbauer”, declaró el tercer ladrón de esta prestigiosa lista, el entrenador de la selección francesa Didier Deschamps. Su desaparición se produce apenas unos días después de la de Mario Zagallo. Fue un gran honor para mí unirme a ambos en 2018 entre los que ganaron el Mundial como jugador y luego como entrenador. Mi dolor hoy es igual a la felicidad que tuve al ser invitado a la mesa de estos dos gigantes del fútbol internacional.
Antes de guiar a la Mannschaft a la coronación suprema como entrenador, el Kaiser “fue primero un jugador de talla mundial, un defensor talentoso y autoritario con su casi siempre club, el Bayern de Múnich, pero también con la selección alemana con la que coleccionó trofeos. Irradiaba una clase, una seguridad en la que muchos buscaban inspirarse”, subraya “DD”, explicando que “a través de todo lo que logró pero también de lo que irradiaba, Franz Beckenbauer era una personalidad extremadamente respetada, que encarnaba la exigencia del nivel muy alto. Extiendo a su familia, a sus seres queridos y a todos aquellos que, como yo, lo admiraban, todo mi apoyo en este triste y doloroso momento. Franz Beckenbauer, exjugador del Bayern, Hamburgo y New York Cosmos, y efímero entrenador del OM, falleció el domingo a la edad de 78 años.