La Franja de Gaza “simplemente se ha vuelto inhabitable”, expresó el viernes 5 de enero el coordinador de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, alarmado por el territorio palestino, devastado por los mortíferos bombardeos israelíes desencadenados por el sangriento ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre.

«Tres meses después de los atroces ataques del 7 de octubre, Gaza se ha convertido en un lugar de muerte y desesperación» y sus habitantes «enfrentan amenazas diarias ante los ojos del mundo», afirmó Martin Griffiths en un comunicado.

Israel ha prometido «destruir» a Hamás -movimiento islamista clasificado como terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea- tras su ataque sin precedentes en suelo israelí el 7 de octubre, que dejó alrededor de 1.140 muertos, principalmente civiles, según un informe. Conteo de la AFP basado en el peaje israelí. Unas 250 personas fueron tomadas como rehenes, de las cuales un centenar fueron liberadas durante una tregua a finales de noviembre. Desde entonces, las operaciones militares israelíes han dejado 22.600 muertos en Gaza, según cifras del viernes del Ministerio de Salud de Hamás, en el poder en Gaza desde 2007. Cifras imposibles de verificar tal como están.

Para Martin Griffiths, “es hora de que las partes cumplan todas sus obligaciones en virtud del derecho internacional –incluida la de proteger a los civiles y satisfacer sus necesidades básicas– y liberar inmediatamente a todos los rehenes”. “Seguimos exigiendo un fin inmediato al conflicto, no sólo para el pueblo de Gaza y sus vecinos amenazados, sino para las generaciones venideras que nunca olvidarán los 90 días de infierno y los ataques a los principios más fundamentales de la humanidad. » él dice.