El nuevo gobierno libanés ha tenido la confianza, pero en algunos si usted se regocija en ella. No se celebra en la plaza de contar los cientos de heridos en el asedio al Parlamento en la tarde de ayer por los manifestantes para impedir la votación. No celebración de los diputados de la mayoría del pro-Hezbolá, que para ser capaz de decir sí (63 de 84 diputados presentes en el salón de clases) para el ejecutivo presidido por Hassan Diab han tenido que pasar la noche en la cámara, el uso secundario de entradas y para desafiar a la sassaiola de los manifestantes. Y no la celebración de los bancos que ver hacia arriba, el camino, el gobierno acaba de lanzar y ya limitado por la fecha límite de marzo de 1.2 mil millones de dólares de la emisión de Eurobonos.

El nuevo gobierno ha prometido Diab, renovará el sector público, reducir las tasas de interés de los préstamos en apoyo de los sectores productivos y el incremento de las exportaciones. «Vamos a trabajar para recuperar la confianza de la población – ha marcado – y para poner en marcha una estrategia a largo plazo que conduzcan a la reforma de una serie, y que requiere de la mayor honestidad y transparencia hacia el pueblo.» Pero la gente no lo puede creer.