El jefe del ejército en el poder en Guinea, coronel Mamady Doumbouya, anunció el miércoles por la noche un duelo nacional de tres días en homenaje a las víctimas de la mortal explosión e incendio en el principal depósito de combustible del país en Conakry. El centro de la capital de la capital seguía paralizado este miércoles tras la tragedia ocurrida durante la noche del domingo al lunes. «Ante esta dolorosa prueba, decreto luto nacional durante tres días a partir del jueves» en homenaje a los 18 muertos y a las más de 200 personas heridas en la catástrofe, declaró, en un discurso en la televisión pública guineana, el coronel Doumbouya, que en Septiembre de 2021 derrocó al presidente Alpha Condé, que llevaba más de 10 años en el poder.

El municipio de Kaloum, centro neurálgico de los negocios de Conakry, se vio duramente afectado durante la noche por la explosión que causó importantes daños materiales y paralizó la economía. El centro de Conakry seguía paralizado el miércoles, a pesar del anuncio de una reapertura «mínima» de las oficinas, más de dos días después de la explosión y el incendio en el principal depósito de combustible de Guinea. En las oficinas de Galaxie Communication, empresa especializada en comunicación y consultoría, reina la desolación.

“Es una locura lo que pasó allí. Mira estas ventanas. Mira mi escritorio. ¿Se imaginan si esta explosión se hubiera producido en pleno día, en un día laborable?”, pregunta Mamadou Dian Diallo, el director general. Cerca de allí, el edificio de siete pisos que alberga la oficina de publicidad de Guinea tiene la apariencia de un esqueleto destripado. Las ventanas volaron y los empleados están ocupados barriendo las oficinas llenas de ventanas rotas y trozos de madera. En el distrito de Coronthie, epicentro de la explosión, ni siquiera la prisión central de Conakry, con su muro de más de diez metros, se salvó de la violencia de la explosión. Hubo 33 heridos, cuatro de ellos graves, dijo Charles Alphonse Wright, ministro de Justicia que visitó el lugar el martes por la noche.

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El Fiscal General abrió una investigación judicial sobre presuntos actos de “incendio intencional” para determinar las causas del incidente e intentar establecer responsabilidades. Por el momento no se dispone de información sobre el origen del incendio. Las reacciones internacionales y las señales de solidaridad continuaron llegando el miércoles. El Papa Francisco expresó su “cercanía a las familias de los fallecidos y a los heridos”. «Que Dios los sostenga y los mantenga en la esperanza», dijo durante su audiencia general semanal en el Vaticano.

Moussa Faki Mahamat, presidente de la comisión de la Unión Africana, expresó el miércoles «su más sentido pésame y su profunda compasión» a las familias de las víctimas de la explosión. La Comisión de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), por su parte, pidió a los países miembros de la organización y a la comunidad internacional «que brinden su apoyo a Guinea en estos tiempos difíciles».

De las 212 personas ingresadas en centros sanitarios, 127 han regresado a sus hogares y 85 siguen hospitalizadas, cuatro de ellas en cuidados intensivos, informó el gobierno el martes por la tarde. También anunció la reanudación del suministro de diésel en el país, aunque se mantendrá la restricción a los camiones cisterna. Conductores y mototaxis invadieron la mañana de este miércoles las estaciones para exigir gasolina en varias localidades. Como resultado, la mayoría de las gasolineras permanecieron cerradas por miedo a ser atacadas, constató la AFP, lo que provocó un fuerte aumento del precio de la gasolina en el mercado negro.