(Ottawa) La Comisión Canadiense de Radio, Televisión y Telecomunicaciones (CRTC) estima que recaudará 200 millones de dólares al año de los bolsillos de servicios de streaming extranjeros como Netflix y Spotify, una suma de dinero que promete redistribuir «cuando corresponda». una necesidad inmediata” en el ecosistema canadiense

Más específicamente, la CRTC anunció el martes que, como parte de la implementación del Proyecto de Ley C-11, exigirá a los comúnmente denominados “gigantes digitales” que paguen el 5% de sus ganancias obtenidas en Canadá.

Esta exigencia entrará en vigor a partir del “año de emisión 2024-2025 que comienza el 1 de septiembre” y las aportaciones recaudadas se redistribuirán, en particular, para garantizar la producción de “noticias locales en radio y televisión”, se lee en el reglamento que especifica cómo se aplica la reforma de la Ley de Radiodifusión

La CRTC también promete que la redistribución del dinero se centrará en “contenidos en francés, contenidos indígenas y contenidos creados por y para grupos que merecen equidad, comunidades minoritarias de lengua oficial”.

Las emisoras tradicionales ya contribuyen a la producción de contenido canadiense, y esta nueva directiva tiene como objetivo crear igualdad de condiciones entre los gigantes tecnológicos y las emisoras canadienses.

“Normalmente, en las industrias de televisión y distribución, los requisitos de contribución para las empresas tradicionales oscilan entre el 5% y el 45% de sus ingresos anuales. En el sector de la radio, las exigencias oscilan entre el 0,5% y el 4% de sus ingresos anuales”, especifica la CRTC.

La organización optó por redistribuir las contribuciones de los servicios de streaming a través de canales que ya existen, como el Canada Media Fund y el Canadian Community Radio Fund.