El presidente José Raúl Mulino defendió sus decisiones de nombrar a Luis Gómez como procurador general de la Nación y a Grettel Villalaz de Allen como procuradora de la Administración, señalando que ejerció su potestad constitucional. Mulino enfatizó que ambos profesionales del derecho son íntegros y con experiencia en sus respectivas áreas, y aunque los conoce personalmente, no los designó por amiguismo.
Mulino destacó que Gómez ha tenido experiencia en casos importantes, como el contrato de radares Finmeccanica y el caso Blue Apple, en el que defendió al exdirector de Contrataciones del Ministerio de Obras Públicas. El presidente afirmó que Gómez no es un desconocido en el ámbito penal y lo eligió por su integridad y capacidad profesional.
En cuanto a Villalaz de Allen, Mulino mencionó que ella ha trabajado con él en el pasado y con diversas entidades, y que su designación también se basa en su idoneidad y profesionalismo. El presidente aseguró que ambos procuradores están comprometidos a servir a la justicia penal del país y a cerrar una era negra iniciada por el expresidente Juan Carlos Varela.
Las designaciones de Mulino deben ser ratificadas por la Asamblea Nacional, y el presidente enfatizó que los candidatos presentados son dignos y decentes, no designados por amiguismo. A pesar de las críticas y dudas expresadas por algunos diputados, Mulino instó a la Asamblea a evaluar a los procuradores por su capacidad y no por relaciones personales.
En cuanto a las responsabilidades de Gómez, el presidente le ha pedido que haga su trabajo con firmeza y sin titubeos, limpiando el Ministerio Público y actuando con determinación en beneficio de la justicia. Mulino recordó su propia experiencia personal y expresó su deseo de que ningún panameño pase por lo que él vivió, subrayando la importancia de tener un procurador comprometido con su labor.
En respuesta a las críticas y dudas de algunos sectores, el presidente Mulino reafirmó su confianza en los procuradores designados y su compromiso con la justicia y la transparencia en el país. Con su enfoque en la integridad y la capacidad profesional de los nominados, Mulino busca garantizar que la justicia penal sea ejercida de manera eficiente y sin influencias indebidas.