En la Ciudad de Panamá, la Comisión de Credenciales recomendó de manera unánime la ratificación de Luis Gómez Rudy como procurador general de la Nación. Durante la sesión, que duró alrededor de dos horas, el abogado enfatizó que las investigaciones se llevarán a cabo de manera transparente y objetiva, basadas en hechos con independencia de las personas involucradas. Si es ratificado por el pleno de la Asamblea Nacional, Gómez Rudy aseguró que su gestión se regirá por la transparencia y la imparcialidad.
En medio del debate, Gómez Rudy, con 21 años de experiencia como abogado, subrayó que su relación previa con el presidente José Raúl Mulino no afectará su objetividad como procurador general. Manifestó que todas las investigaciones que estén bajo su responsabilidad se realizarán siguiendo criterios de transparencia y objetividad, dejando que los hechos y evidencias determinen el curso de las investigaciones.
La designación de Gómez Rudy, de 45 años, ha generado controversia debido a su pasado como abogado del presidente Mulino en casos como el de Finmeccanica y la defensa de otros funcionarios. Sin embargo, el procurador designado ha destacado que su objetivo principal es restaurar la confianza de la ciudadanía en el Ministerio Público, promoviendo la transparencia y la imparcialidad en todas las actuaciones.
Gómez Rudy también ha señalado su compromiso con la lucha contra la corrupción, afirmando que será un pilar fundamental de su gestión de ser ratificado como procurador. Durante su proceso de designación, se reunió con diputados de diferentes partidos políticos para discutir sus planes y responder a preguntas sobre su enfoque en casos de alto perfil que involucren a miembros del gobierno actual.
En cuanto a otros nombramientos realizados por la Comisión de Credenciales, se avaló al subdirector de la Autoridad de Recursos Acuáticos, Gerardo Irimia, así como se recomendó la designación de Fernando Correa Jolly y José María Herrera Ocaña como miembros de la junta directiva de la Caja de Ahorros. Durante el debate, surgieron cuestionamientos sobre posibles conflictos de interés y vínculos con entidades financieras, lo que generó tensiones entre algunos diputados presentes.
En conclusión, la designación de Luis Gómez Rudy como procurador general de la Nación ha pasado por la fase de recomendación de la Comisión de Credenciales, donde se destacó su compromiso con la transparencia, la objetividad y la lucha contra la corrupción en el ejercicio de sus funciones. Ahora, su ratificación por el pleno de la Asamblea Nacional marcará el inicio de su gestión al frente del Ministerio Público, enfrentando diversos desafíos y expectativas en el ámbito judicial panameño.
