China y Estados Unidos crearán un grupo de trabajo sobre cooperación climática, anunciaron ambos países el miércoles, pocas semanas antes de la conferencia internacional sobre el clima (COP28).

Este grupo de trabajo se centrará en “la transición energética, el metano, la economía circular y la eficiencia de los recursos, provincias/estados y ciudades sostenibles y con bajas emisiones de carbono, y la deforestación”, dijo en un comunicado compartido por los medios estatales chinos y el Departamento de Estado de Estados Unidos. Los miembros del grupo liderarán “el diálogo y la cooperación para acelerar acciones concretas a favor del clima”, según el texto.

La declaración conjunta se produce tras las conversaciones entre los enviados climáticos de China y Estados Unidos, Xie Zhenhua y John Kerry, celebradas del 4 al 7 de noviembre en California, Estados Unidos. Las dos partes acordaron “trabajar juntas y con otras partes” para “abordar uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo para las generaciones actuales y futuras de la humanidad”, según su declaración. También relanzarán “diálogos bilaterales sobre políticas y estrategias energéticas” y “profundizarán los intercambios políticos sobre soluciones de ahorro de energía y reducción de emisiones de carbono”.

Estados Unidos y China también se comprometen a “iniciar inmediatamente la cooperación técnica” para reducir las emisiones de metano, de las cuales China es el mayor emisor del mundo. Pekín presentó la semana pasada un importante programa para controlar sus emisiones de este gas de efecto invernadero, sin proponer, sin embargo, un objetivo de reducción preciso. En su declaración conjunta, ambas partes acordaron «desarrollar sus respectivas acciones/objetivos de reducción de metano», que se incluirán en sus planes de reducción de emisiones para 2035 – conocidos como «contribuciones determinadas a nivel nacional» (CDN).

La 28ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (COP28) se llevará a cabo del 30 de noviembre al 12 de diciembre en Dubai, Emiratos Árabes Unidos. La cooperación entre China y Estados Unidos a menudo se considera crucial para generar impulso en las negociaciones sobre el clima.