Roger Federer estuvo presente en el Stade de France el sábado por la noche para seguir la final de la Copa Mundial de Rugby entre Nueva Zelanda y Sudáfrica. El suizo, que vestía de verde y amarillo (pero que también había recibido de manos de Richie McCaw una camiseta neozelandesa autografiada por los All Blacks justo antes del partido) tenía su corazón junto a los Springboks dados los orígenes de su madre Lynette, nacida en Kempton Park, en los suburbios del noreste de Johannesburgo.
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Tras la estrecha victoria de Pieter-Steph du Toit y sus compañeros (12-11), Federer tuvo el privilegio de poder compartir la alegría de los ganadores en su vestuario. Los videos lo muestran abrazando al medio scrum Faf de Klerk con una cerveza en la mano y luego felicitando a sus compañeros campeones mundiales.
Otro gran nombre de la bolita amarilla estuvo presente en las gradas: Novak Djokovic. El serbio, con veinticuatro títulos de Grand Slam, también pudo reunirse antes de la reunión con Bill Beaumont, presidente de World Rugby. Luego ocupó su lugar junto a la cantante Rita Ora para asistir a la coronación sudafricana. Sin embargo, no sabemos si los dos gigantes del tenis pudieron darse la mano en el recinto dionisiano.
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